Los órganos judiciales de Cantabria recibieron durante el primer trimestre de este año 2023 un total de 247 demandas de disolución matrimonial, lo que representa un descenso del 18,5 por ciento respecto a las registradas en el mismo periodo de 2022, cuando los procedimientos de este tipo que llegaron a los juzgados cántabros fueron 303. Así lo ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria.
Los 247 procedimientos de disolución matrimonial ingresados en Cantabria representan una tasa de 42 demandas por cada 100.000 habitantes, inferior a la de la media nacional, que se sitúa en 47,1.
Dentro de la denominación “disoluciones matrimoniales”, el informe se refiere a los divorcios de mutuo acuerdo y a los no acordados, a las separaciones consensuadas y a las no consensuadas, y también a las nulidades matrimoniales.
En el periodo analizado se presentaron en Cantabria 237 demandas de divorcio -cincuenta menos que un año antes- y 10 de separación – seis menos que en 2022.
De los 237 divorcios, la mayoría (137) fueron de mutuo acuerdo, un 24,7 por ciento menos que en el mismo periodo de 2022 (182); mientras que los no consensuados ascendieron a 100, cinco menos que un año antes.
En el caso de las separaciones, 9 fueron consensuadas, tres menos que en 2022, y una no consensuada, frente a cuatro de 2022.
Por otro lado, los juzgados de primera instancia con competencia en familia de Cantabria no registraron ningún procedimiento de nulidad matrimonial de enero a marzo de 2023, al igual que en el mismo periodo de 2022.
Dentro de la denominación “disoluciones matrimoniales” el informe se refiere a los divorcios de mutuo acuerdo y a los no acordados, a las separaciones consensuadas y a las no consensuadas, y también a las nulidades matrimoniales.
En Castro Urdiales, las demandas de disolución matrimonial presentadas en el primer trimestre de 2023 fueron 12 (7 divorcios consensuados, 4 no consensuados y 1 separación no acordada).
La estadística también analiza los procedimientos presentados en los juzgados solicitando la modificación de alguna de las medidas acordadas en sentencia –bien en sentencia de separación, divorcio o nulidad, bien en sentencia en la que el juzgado acordó medidas relativas a la guarda y custodia de hijos e hijas nacidos fuera del matrimonio-.
Los juzgados de familia de Cantabria registraron 103 peticiones de este tipo, 37 menos que en el mismo periodo de 2022, cuando se recibieron 140. De ellas, en Castro fueron 9.