El diputado castreño del Partido Popular, Álvaro Aguirre, ha valorado en Castro Punto Radio los resultados electorales del pasado domingo.
En el ámbito local ha reconocido que “el PSOE ha sido con claridad la fuerza más votada en Castro y les felicitamos”, pero no comparte que “hayan arrasado porque no hay ninguna mayoría absoluta”. Se queda con “el notable incremento del PP que ha conseguido 2.000 votos más que en las anteriores elecciones de 2019, lo que supone un incremento del 72%, con lo que estoy muy agradecido a los castreños que han apostado por nuestro proyecto”.
Ha añadido que “competíamos con Vox también que ha conseguido un apoyo notable”.
En el conjunto de Cantabria “hemos sido los claros ganadores y estamos muy satisfechos. Somos la primera fuerza política en 82 de los 102 municipios de la región con el 42,09% de los votos totales, nueve puntos por encima del PSOE y 30.000 votos más que ellos”. Con estos resultados “tenemos dos diputados cántabros en el Congreso que podrían ser tres porque todo hace indicar que con el recuento del voto CERA (españoles residentes en el extranjero) tendremos el tercero en detrimento de Vox”.
Los populares están muy pendientes del recuento total de estos votos y del cierre definitivo del recuento en todas las mesas este viernes “porque podrían cambiar cosas”. Ha defendido que “nada está decidido ni cerrado porque sigue sin estar claro quién será el presidente”.
No obstante, “reivindicamos nuestro derecho a gobernar como fuerza más votada en el país y cómo los únicos que podemos dar estabilidad. Ofrecemos a España un Gobierno estable que se centre en los intereses de todos y no en los de una minoría que quiere intervenir en el devenir de todas las comunidades autónomas. No queremos estar sometidos a la tiranía de las minorías”.
Ha reconocido que “esperábamos mejores resultados y más escaños para gobernar en solitario pero, si no puede ser, hay fuerzas con las que no tenemos nada que hablar, pero ojalá el resto hiciera prevalecer los intereses de España”.
La alternativa es “un Gobierno de Pedro Sánchez que no puede ofrecer estabilidad del brazo de aquellos que no creen en el sistema del que forman parte”.
Y una tercera opción que pasa por la repetición de elecciones, algo que “dependerá del sentido de Estado del resto de partidos”.
