Las autoridades sanitarias cántabras no han detectado aún la presencia del mosquito tigre en nuestra comunidad autónoma, pero el Gobierno Vasco mantiene vigilados 26 municipios vizcaínos, algunos de ellos limítrofes con nuestra región, por tanto con Castro Urdiales.
Se trata de un insecto originario del sudeste asiático, que “ya se detectó en España en 2013 y que sigue en vigilancia, reforzándose ahora por parte de las administraciones la información periódica a la ciudadanía”. Así lo ha señalado en Castro Punto Radio Javier López Orruela, miembro de SEO Birdlife, trasladando que “ahora contamos con herramientas tecnológicas, se ha creado una página web y una aplicación móvil (Mosquito Alert, https://www.mosquitoalert.com) en la que se traslada toda la información sobre las monitorizaciones que se realizan y su progresión por el territorio”.
Este mosquito tigre llegó a la península “por el arco mediterráneo y, de ahí, a través del río Ebro, como especie que se cría en una línea de agua, hasta La Rioja o País Vasco”.
Son las hembras las que pican “para buscar la sangre que ayuda al desarrollo de sus huevos. Es un insecto más diurno que otras especies, con unas rayas blancas y que vuelan bajo, por lo que suelen picar en las piernas”. En su fase adulta “viven apenas entre 10 y 20 días”.
Se trata de un mosquito que genera cierta preocupación en cuanto “puede ser trasmisor de enfermedades como el dengue, el zika o la fiebre amarilla. No obstante, para que las trasmita, deben tener el virus recogido de otro huésped, lo que es bastante improbable”.
Para evitar su picadura “se pueden utilizar repelentes comerciales o elementos como la citronela o el limón”. En caso de que nos piquen “evitar rascarse, lavar la zona hinchada con agua y jabón o utilizar alguna crema al efecto”.