La secretaria de Salud Laboral de Comisiones Obreras en Cantabria, Laura Lombilla, ha hablado de “jornada triste” tras el fallecimiento de un trabajador en la empresa Derivados del Flúor en Ontón. Ha lamentado que “tenemos que hablar de una muerte más en accidente laboral y detrás una situación dramática en la que una persona ha perdido la vida”.
A la espera de que concluya la investigación sobre este caso, ha preferido ser cauta, pero sí ha señalado que “la siniestralidad laboral está llegando a niveles imparables con cifras que no teníamos hacía años”. Ha dejado claro que “son las empresas las que tienen la obligación de implementar y cumplir todas las medidas de prevención y, desde CCOO no creemos en las fatalidades y pensamos que los accidentes se pueden evitar o, al menos, que sean leves”.
Ha insistido en “confiar en la investigación de la Inspección de Trabajo y ser prudente hasta que se conozcan los resultados”, pero preguntada por los medios en prevención de las subcontratas, teniendo en cuenta que el fallecido en Ontón pertenecía a una de ellas, ha dicho que “hay un problema con estas empresas en cuanto que, generalmente, los complementos de prevención no con quizá muy exhaustivos”.
Ha aprovechado para pedir “más medios para la Inspección de Trabajo para que la vigilancia sea más eficaz” y también “que las sanciones sean alta y al máximo posible”.