10 SEPTIEMBRE 2018 /
Nuevo giro de tuerca en el conflicto abierto en la Educación cántabra. Muchos centros educativos de Infantil y Primaria de la región han decidido que este curso escolar no realizarán actividades complementarias y extraescolares, entendiendo como tales asuntos como excursiones, salidas, visitas culturales, viajes de estudios, fiestas de Navidad o Carnaval, funciones…
Esta cancelación responde a la decisión de la Consejería de Educación de no considerar como lectivas o pedagógicas todas esas horas que los maestros pasan con los alumnos al margen de las clases habituales.
La postura del profesorado ha generado malestar entre las familias de los alumnos, que entienden que “esto ha llegado a un punto en el que se ha pasado la línea roja. En las manifestaciones y huelgas de los profesoras se dice que es por el bienestar de los alumnos y, desde luego, no está siendo así”. Son declaraciones, en Castro Punto Radio, de la presidente de FAPA (Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumno), Leticia Cardenal.
Ha insistido en que “los alumnos están pagando el pato”. Ha recordado cómo “nosotros siempre hemos defendido la labor del docente” pero “hay que diferenciar las horas lectivas de los alumnos y las de los profesores. Hasta ahora, siempre se ha hablado de derechos laborales y los hemos apoyado, pero que los maestros vean reducida su jornada, no tiene que ver para que pase lo mismo con la de los alumnos”.
Las horas lectivas para los estudiantes “son 25 horas y, si son menos para los docentes, es problema de la Administración, que tendrá que poner más personal para cumplir las horas del alumnado. Si no hay suficiente profesorado, habrá que incrementarlo”, ha defendido Cardenal.
Ha afirmado también que “cuando se cambió el calendario escolar, nos vendieron que las semanas de vacaciones para los alumnos no lo eran para los docentes, sino que iban a coordinar y programar e incluso iban a hacer formación obligatoria. Estamos viendo que esto no es así. Es cuestión de la Administración ver qué tiene que hacer, pero la jornada del alumnado no puede verse perjudicada por los acuerdos sindicales”.
Considera FAPA que “igual el consejero de Educación tiene que decir, claramente, cuál es la jornada lectiva del profesorado, cuántas horas tiene que trabajar a la semana y a qué tiene que dedicar el tiempo. Así se verá si tienen razón y hay que hacer algo más o si están equivocados”.
Toda esta situación “está comenzado a afectar al día a día de los centros y todo esto puede desencadenar un rechazo de los padres a los profesores”.
Ha recordado que “también las AMPA estamos haciendo mucha labor que no nos corresponde, como aulas matinales y actividades extraescolares por la tarde. Tampoco es trabajo nuestro y, en ningún momento hemos planteado dejar de hacerlo porque creemos que es para beneficio de los centros y de los alumnos. Si nos ponemos así, igual empezamos a perder todos y, sobre todo, los perjudicados son los niños”.
Lo que tiene claro Cardenal es que “nunca tienen que pagar los alumnos” y que, “se ha llegado a un momento en el que ya no sólo vale la negociación con el consejero de Educación, que no se pone de acuerdo con los docentes ni viceversa. Creo que tendría que intervenir el secretario general del PSOE en Cantabria para mediar en este conflicto”.