El Juzgado de lo Contencioso Administrativo Número 2 de Santander ha fijado para mitad de marzo la vista entre las partes, como publica El Diario Montañés.
Recordamos que el Ayuntamiento pagó en su momento la cuantía de la sanción, 15.000 euros de los 30.000 totales por pronto pago, pero el equipo de Gobierno no comparte las conclusiones del expediente sancionador en el que se señala que los fuegos se lanzaron sin autorización.
Por el contrario, el concejal de Festejos, Gorka Linaza, explicaba en su momento en Castro Punto Radio que “la víspera del Coso Blanco, la Dirección de Puertos del Gobierno de Cantabria nos dio la autorización para prender los fuegos desde el rompeolas, metimos la documentación telemáticamente en la Delegación del Gobierno y no tuvimos ninguna respuesta”, ni autorizando ni desautorizando. “No veíamos ninguna pega hasta que 20 días después de lanzarlos recibimos la sanción. En ese periodo, nadie se puso en contacto con nosotros”.
“El error”, reconocía Linaza, “puede estar en que la no repuesta de la Delegación del Gobierno la consideramos un sí al permiso, pero pasaron 20 días antes de que llegara la multa y nadie se puso en ese periodo en contacto con nosotros. En cambio, la denegación solicitada días antes para lanzarlos desde La Atalaya llegó en pocas horas”.