La Guardia Civil ha procedido a la detención de un hombre con iniciales A.N.N. de 32 años y natural de Rumanía, como presunto autor de al menos seis robos en establecimientos hosteleros de Cantabria, utilizando una técnica de “extracción del cilindro” para abrir las puertas.
Fue interceptado el pasado 20 de febrero en Castro Urdiales tras perpetrar un robo en un bar de Gajano y huir a gran velocidad del lugar. En el vehículo, además del dinero sustraído en el establecimiento, se le intervino lo necesario para cometer robos.
Entre otros efectos portaba herramientas para atacar las cerraduras, material para ser utilizado en posibles robos con escalo o utensilios para recortar persianas laminadas. También se encontró una maza con la que se supone reventaba las máquinas recreativas o expendedoras.
Efectivos del Grupo de Delitos contra el Patrimonio de la Guardia Civil de Cantabria detectaron al ahora detenido a principios del mes de febrero, sospechando que su presencia podía guardar relación con la comisión de robos con fuerza.
Una vez averiguada su identidad se tuvo conocimiento que había sido detenido anteriormente por robos en Murcia, Málaga, Alicante y Madrid. En concreto en Madrid se le considera presunto autor de 11 robos en establecimientos.
Se averiguó que para sus desplazamientos alquilaba vehículos, recorriendo una media de 400 kilómetros diarios. Cuando fue detenido había recorrido casi 3.000 kilómetros en siete días, constatando su presencia en Cuenca, Madrid, Burgos y Cantabria.
La Guardia Civil de Cantabria tenía constancia de varios robos en establecimientos hosteleros, en los que sus cerraduras habían sido atacadas, posiblemente utilizando técnicas de “extracción del cilindro”.
Se trata de una habilidad paralela al bumping, pero en este caso lo que se pretende, mediante un extractor, es ir forzando el bombín de la cerradura hasta que se extrae su cilindro, para posteriormente girar los mecanismos internos y abrir la puerta.
Con las pruebas conseguidas durante la investigación, unida a lo intervenido al detenido, que actuaba en solitario, se le considera presunto autor entre el 9 y el 20 de febrero de seis robos en establecimientos hosteleros de las localidades de Colindres, Guriezo, Hoznayo, Heras y Gajano. Tras el último pudo ser detenido antes de que abandonara Cantabria nuevamente.
El objetivo principal de todos estos robos era las recaudaciones de las máquinas existentes en los establecimientos, consiguiendo en tan solo uno de ellos un botín de casi 3.000 euros.
La investigación continúa por si el ahora detenido tuviera relación con otros robos en establecimientos por las diferentes provincias por donde se tiene constancia de su presencia.
Tras su detención fue puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Medio Cudeyo, quien ordenó su ingreso en prisión.