22 ABRIL 2016 /
El consejero de Obras Públicas y Vivienda, José María Mazón, ha anunciado hoy una inversión de 2 millones de euros en la adquisición de pisos, en el mercado libre, que quedarán integrados en el parque público de vivienda, destinados al alquiler social, a través de una operación que será ejecutada por la empresa Gesvican, tal y como recoge hoy el Boletín Oficial de Cantabria, noticia de la que ya hemos informado en Castro Punto Radio.
La compra por parte de Gesvican de la plena propiedad de estas viviendas, en diversas localidades de Cantabria, tiene como finalidad su utilización para la resolución de situaciones de emergencia habitacional y favorecer, al tiempo, el acceso a las viviendas de alquiler. Los pisos tendrán que estar ubicadas en los municipios de Santander, Torrelavega, Castro Urdiales, Camargo y El Astillero.
El precio máximo de adquisición por metro cuadrado de superficie útil de vivienda, antes de impuestos, será de 1.394 euros para los municipios de Santander y Castro Urdiales y de 1.150 euros, con un límite máximo por vivienda, antes de impuestos, de 120.000 euros, para los municipios de Santander y Castro Urdiales y de 100.000 euros para el resto.
En el momento de la presentación de las propuestas, tanto las viviendas, como los edificios que las alberguen, tendrán que cumplir los siguientes requisitos y condiciones:
La superficie útil mínima de las viviendas será de 60 m², unas dimensiones que se calcularán y medirán según los criterios de las ordenanzas generales de diseño y calidad para las viviendas protegidas de Cantabria. Las viviendas tendrán, al menos, dos dormitorios, siendo preferibles las de tres.
En cualquier caso todas tendrán salón, cocina y al menos, un baño con lavabo, inodoro y bañera o ducha. Todas las habitaciones, a excepción de los baños, tendrán ventana al exterior. La superficie útil mínima de los dormitorios individuales será de 6 m², con un dormitorio principal de superficie útil no menor de 12 m².
Las viviendas podrán ser de nueva construcción o usadas y deberán tener licencia municipal de primera ocupación, no estar fuera de la ordenación urbana y construidas en suelo clasificado actualmente como urbano.
Además, deberán estar en buen estado de conservación y disponer de cedula de habitabilidad o calificación definitiva, cuando se trate de viviendas protegidas, y contar con el preceptivo certificado de eficiencia energética.
Las viviendas tendrán que estar inscritas en el Registro de la Propiedad a nombre del interesado y en las condiciones expresadas, libres de cargas y gravámenes. Los garajes y trasteros no son objeto de esta oferta pública de adquisición, salvo que estén vinculados a la vivienda.
La antigüedad del edificio no podrá ser superior a 35 años, su estructura deberá ser de hormigón armado, tendrá que estar constituido en comunidad de propietarios, dispondrá de ascensor, salvo que la vivienda ofertada se ubique en planta baja, y las zonas comunes del edificio tendrán que estar en buen estado de conservación, y cumplir la normativa de habitabilidad, así como el resto de normativa técnica.
En la imagen de esta mañana, el consejero en el centro, flanqueado por el director general de Vivienda, Francisco Javier Gómez y el gerente de Gesvican, José Orruela.