La Peña Racinguista Peru Zaballa y Zamanillo de Castro Urdiales fue uno de los primeros colectivos castreños que se movilizó para ayudar a los damnificados por la DANA en Valencia y, pocas horas después del suceso se ponía en contacto con la Peña Racinguista de Valencia para realizar una donación de 510 euros.
En Castro Punto Radio hemos hablado con el presidente de la peña valenciana, Agustín Wrba, que se mostraba “muy agradecido por la respuesta tan rápida por parte de nuestros compañeros en Castro y por el interés que están mostrando en todo momento a través del presidente, con el que estamos en contacto”.
Una entrevista que impresiona por lo que ha detallado Agustín, aspectos de la tragedia que no hemos escuchado estos días.
Ha detallado que la peña racinguista en Valencia, englobada dentro de la Casa de Cantabria en esa ciudad, ha recaudado hasta el momento unos 2.000 euros a través de donaciones. “Un dinero que estamos guardando y que se va a mantener ahí, ya que desde los centros de donación nos dicen que están desbordados y sabemos que, de aquí a dos semanas, van a hacer falta muchas cosas. Por tanto, tanto eso como el material que hemos recopilado, lo tenemos guardado en un punto y lo iremos enviando a medida que vaya siendo necesario”. Ha dejado claro que “informaremos en todo momento con facturas en qué se va gastando ese dinero”.
En la conversación con Agustín nos hemos detenido en el hecho de que los almacenes de alimentos y material que hay en los puntos afectados “están llenos, y desde los centros de reparto se encuentran desbordados”. Y nos hemos parado en ese punto porque, como ha señalado, esas donaciones “no están llegando como deberían a la gente que se encuentra en las denominadas zonas 0 de la tragedia”.
Ha lamentado que “la maquinaria pesada para retirar coches y limpiar calles ha llegado tarde y ahora tienen mucha prisa. Con todo, para que no se entorpezca su labor, no dejan acceder ni furgonetas, ni camiones ni personas a pie que puedan llevar alimentos y ropa. El que lo necesite tiene que acudir caminando a los centros de distribución a recogerlo, pero no pueden hacerlo porque, si salen de las calles donde están sus viviendas, no les dejan volver a entrar”.
Ha criticado que “se está dando a entender que no hace falta comida ni ropa y eso es mentira. Son más de 200.000 las personas afectadas y están recibiendo la ayuda mínima porque desde el centro de gestión de la situación nos dicen que no podemos entrar y que se encargan ellos. Pero claro, llaman a la Guardia Civil diciendo que necesitan comida y les contestan que se la llevan. Si por el camino surge alguna urgencia en la que tienen que intervenir, esos alimentos o productos de primera necesidad no llegan hoy sino mañana. Ya están un día sin comer. No podemos ni comprar pañales, porque no hay, estamos con problemas de desabastecimiento en Valencia capital y en la provincia. Hasta en Alicante, a donde va mucha gente, se están quedando sin nada”.
Ha insistido en “la tardanza en actuar y en traer la maquinaria pesada y ahora tenemos calles con el fango ya endurecido como la piedra, muy mal olor, cadáveres en descomposición y comida podrida en los supermercados. Nos dicen que por eso también es por lo que impiden acceder la ayuda de particulares, que sólo se encuentran con barreras cuando, al menos, podrían habilitar vías seguras para entrar con comida y productos de primera necesidad”.
Agustín ha contado también que “una vez pasados los primeros días de mucho shock, los afectados empiezan ahora a preocuparse, y mucho, por el mañana, cuando la situación vuelva a cierta normalidad, la tragedia ya no sea tan mediática y las máquinas abandonen los municipios. Por el momento, lo único que se ha aprobado es una ayuda de 6.000 euros de la Generalitat Valenciana, que es una cifra ridícula para todo lo que han perdido estas familias. Porque lo que ha anunciado el Gobierno de España parece que está supeditado a que se aprueben los Presupuestos Generales del Estado, lo que es un chantaje”.
También ha dicho que “hay algunos seguros de coches que están pidiendo a sus propietarios que los lleven al desguace para que un perito pueda hacer una valoración de los daños, cuando muchos de ellos están unos debajo de otros y sepultados bajo el barro”.
Por otro lado, “hay muchos autónomos que han perdido su negocio y el polígono industrial Poyo, en Riba-roja de Turia, que es el pulmón de Valencia con más de 600 naves, está completamente inundado”.
A la tragedia por las pérdidas humanas y materiales se suma el hecho de que “la economía valenciana se va a ver seriamente afectada”.
Imagen de miembros de la Peña Racinguista valenciana guardando la ayuda llegada desde Castro, entre otros sitios.
En el siguiente enlace se puede escuchar o descargar la entrevista mantenida con Agustín Wrba: