Como ya hemos informado, han comenzado las obras de construcción del Edificio Plaza, en la esquina entre las calles La Ronda y Eladio Laredo. Unos trabajos que, no sólo supondrán habilitar un nuevo inmueble moderno, sino que recuperarán toda esa zona y los entornos de tránsito de peatones en una calle que, hasta el momento, carecía de acera en uno de sus lados.
Hemos hablado en Castro Punto Radio con el responsable de la empresa que se encargará de la construcción, Loizaga. José Ángel Martínez ha recordado que “han sido dos años de tramitaciones urbanísticas hasta poder llegar a este momento. El de comienzo de una obra que es compleja porque empezamos con las excavaciones para poder bajar tres plantas de sótano donde irán los garajes”. Calcula, en principio, que “llegar a cota cero nos llevará un año y, a partir de ahí, otro más para concluir el edificio”.
Ha pedido “un poco de paciencia” a los vecinos de la zona porque “para mejorar hay que esforzarse un poco y aguantar alguna molestia, como es lógico en obras de esta envergadura”.
Entre otras cosas ha querido explicar, “ante algunas inquietudes que nos han llegado”, los criterios que se han seguido a la hora de instalar el vallado de la obra, que corta una parte de la acera de la calle La Ronda. “Todo es por cuestiones de seguridad para peatones y vehículos”.
Cuando concluyan, “habrá una acera que, a la altura del edificio, será tres metros más ancha que la que hay ahora justo antes de la parcela”.
El Edificio Plaza tendrá tres sótanos y seis altura de viviendas de una, dos y tres habitaciones con áticos. Un inmueble “moderno en la línea del cumplimiento de las normas actuales en cuanto a acabados y aislamientos”. En las plantas bajas, “locales comerciales y, por lo que sé, en uno podría ir un banco”.
Es un dato que “he podido escuchar a los cooperativistas”. Y es que se trata de un edificio para cuya construcción se ha conformado una cooperativa. “Actualmente son 53 integrantes que se han unido para hacer la obra por su cuenta, sin tener que depender de un promotor. Ellos ha contratado al arquitecto, al asesor y se han encargado de la financiación con los bancos”. Con ello, “se ahorran los costes extra que supondría comprar una vivienda a un promotor”.
