El Centro de Emergencias del 112 recibió ayer el aviso a las 21.45 horas de ayer, martes, por un niño de 12 años, vecino del País Vasco, que se había precipitado por una zona de acantilado de Cotolino, en Castro Urdiales, mientras se encontraba jugando con un amigo.
Se movilizaron Bomberos y Policía Local de Castro, Bomberos del 112 Cantabria, Guardia Civil, el helicóptero de Salvamento Marítimo, así como el equipo de intervención de Protección Civil del Gobierno de Cantabria con un médico, dos rescatadores y el técnico de guardia.
Tras ser localizado, el niño sufría un fuerte golpe en el pecho y fue trasladado en el helicóptero medicalizado hasta el aeropuerto de Santander, y de ahí en una UVI hasta el Hospital de Valdecilla, donde sufrió una parada cardiorrespiratoria.
Descanse en paz.