Doce integrantes del colectivo castreño Mi Pueblo Limpio se trasladaron a Valencia, del 27 de noviembre al 1 de diciembre, para colaborar con las necesidades de los municipios afectados por las riadas. Como ha detallado en Castro Punto Radio Encarni Cantero, realizaron algunas labores en Catarroja, aunque estuvieron fundamentalmente en Paiporta.
Ha señalado que es “una ciudad en guerra de la que hemos vuelto muy impresionados y tocados emocionalmente”. Y es que, “está todo devastado, destrozado, locales y garajes llenos de barro y ausencia total de vida en las calles, más allá de la gente que está limpiando y del sonido de sirenas y camiones”.
Más de un mes después “sigue haciendo falta mucha gente y manos y los vecinos de estas zonas tienen mucho miedo a que los olvidemos porque están muy lejos de reconstruir sus hogares y de volver a recuperar su vida”.
Ha señalado que “sigue habiendo voluntarios pero no tiene nada que ver con las primeras semanas. El boom ha bajado mucho y es también normal porque la gente tiene sus vidas y obligaciones”. Para Cantero es “el momento de que las instituciones tomen el relevo porque hay cosas a las que los voluntarios no pueden llegar y requieren de intervención profesional. Hay trabajadores de distintos sectores que están llegando también dispuestos a ayudar en temas de electricidad, fontanería o albañilería”, pero ha insistido en la necesidad de “la intervención de las instituciones que se están quedando cortas”.
Los integrantes de Mi Pueblo Limpio colaboraron con labores para limpiar garajes “que siguen llenos de barro, y con los trasteros repletos de cosas que sacas sin saber que son porque se han convertido en bolas de barro. Todo ello sin luz y con mucho olor a putrefacción y cañería”.
Al margen de este asunto, ha recordado que este sábado en el parque Amestoy, celebran su fiesta navideña, una cita a la que ha invitado a acudir a todos los castreños y visitantes y que servirá para seguir concienciando de la necesidad de mantener limpios nuestros entornos y ser responsables con el medio ambiente. “Entre otras cosas, vamos a llevar miles de unidades de un residuo que es muy habitual en Castro”. No ha querido desvelar qué es a la espera de que los que acudan lo descubran allí.