25 NOVIEMBRE 2016 /
El gerente de Conservas Lolín, Jesús Gutiérrez, ha dado en Castro Punto Radio todos los detalles sobre la tramitación que la empresa está realizando para trasladarse a Vallegón y que en el edificio que actualmente alberga la fábrica, se instale un centro comercial y servicios deportivos.
Como ha explicado, “llevamos ya tres años pensando en esto porque los tiempos cambian y tenemos que ir con ellos”. Actualmente la empresa cuenta en la zona con casi 16.000 metros cuadrados de suelo industrial y “no nos hace falta, porque la mitad son ociosos, además de que tiene otros posibles usos compatibles con la Ley”.
Cada vez hay en el entorno más superficies comerciales, Ashland también se traslada y “ante la posibilidad de que a futuro nos dijeran que nos teníamos que mover de allí, nos hemos querido adelantar y tomar la iniciativa”.
Hace ya un año que Gutiérrez habló con el alcalde y con concejales del equipo de Gobierno sobre este asunto, de cara a realizar la modificación del PGOU necesaria para cambiar el uso de la parcela de industrial a comercial y el gerente de Conservas Lolín espera poder firmar el correspondiente convenio urbanístico con el Ayuntamiento en los próximos días.
Ese acuerdo recoge las dotaciones que la empresa aporta a la Administración local para poder realizar ese cambio de uso en base a la normativa. De esta forma, “nosotros damos dotaciones por 800 metros cuadrados, que serían aceras en todo el perímetro, una pasarela de madera por el río, una rampa de paso a nivel desde el río y hasta el acceso al túnel de Mioño como senda peatonal y de bicicletas, y cedemos el pozo que tenemos, que daría agua a unas 4.000 personas”.
Al mismo tiempo, se entregarían al Ayuntamiento, en la planta de arriba del inmueble, “1.000 metros cuadrados para uso público y para equipamientos que tanta falta hacen”.
Por lo demás y, al margen de la parte que tocaría al Consistorio, Conservas Lolín venderá el resto del edificio a una empresa que se encargará de la comercialización de los distintos espacios, yendo en la planta de arriba un gimnasio y, en el resto diferentes establecimientos con distintas firmas, para conformar un centro comercial, con un aparcamiento en planta baja de 3.200 metros cuadrados.
Con todo, Gutiérrez, que ya ha visto el proyecto y ha dicho que es “ilusionante”, estima que se puedan crear “entre 90 y 110 puestos de trabajo”.
El gerente de Conservas Lolín quiere que la fábrica esté en su nueva ubicación de Vallegón para finales de 2017 o comienzos de 2018. Las obras de la nueva planta en el polígono, “se harían de forma simultánea con la adaptación del actual edificio a zona comercial. Ése es el compromiso que nos hemos marcado”.
En Sámano, la instalación de la conservera tendrá 7.500 metros cuadrados brutos, con una única planta de 5.600 metros donde ubicar las líneas de producción y una visera de 350 metros para oficinas. Así lo ha detallado Gutiérrez.