2 JUNIO 2015 /
Juanchu Bazán, militante cualificado de CastroVerde, tiene claro cuál sería el pacto de Gobierno en Castro que él intentaría conformar y pasa por un acuerdo entre CV, PSOE y PRC, lo que facilitaría “una relación fluida con el gobierno de Cantabria”. Así lo recoge en un artículo que ha publicado en su blog y sobre el que ha hablado en Castro Punto Radio.
Y es que, para Bazán, “la clave final es responder a ese estado de esperanza de que por fin se va a poder hacer una nueva política en los ayuntamientos, con la presencia de todos los grupos alternativos representados en Castro y, más que nada, por CV, que ha hablado en su campaña del buen Gobierno y de hacer una nueva política”. Respondiendo a eso, “entiendo que hay que mirar más allá de los pactos que podrían ser convencionales. No sirve con hacer una mayoría, sino intentar buscar mayorías que tengan más legitimidad democrática”.
Con esto, “más allá de decirle al Gobierno de Cantabria que aquí también tenemos sus siglas, se trata de enviarles un mensaje de que ha habido un acuerdo de una gran mayoría social, que es una señal para que comprendan que la situación de Castro es preocupante y hay que atenderla”.
Ante lo que Bazán ha calificado como “crisis de ciudad heredada por los planteamientos que conocemos de hecatombe urbanística”, asegura que ” hay una necesidad de invocar a mirar a Cantabria, porque la comunidad tiene la mayor parte de las competencias de las que depende la calidad de vida de los ciudadanos: empleo, sanidad, educación, servicios sociales…”
Este militante de CV defiende que “se trata de vencer una inercia que ha sido muy calamitosa para Castro y que nos ha situado muy por debajo del nivel que corresponde a un municipio de 30.000 habitantes” y decirle al Ejecutivo regional que “ustedes le deben a esta ciudad las inversiones, planes y programas que hacen falta para que empiece a levantar cabeza de la crisis”.
En este sentido, a Bazán no le gustó lo que dijo Ángel Díaz-Munío al respecto del Gobierno de Cantabria y del PRC y éste fue el “revulsivo por el que yo me planteo que hay que hacer otro discurso”. Asegura que “el candidato a alcalde no puede referirse así sobre el futuro presidente de Cantabria. No me gustó a mí ni a otros compañeros de partido”. En cualquier caso, ha alabado que la formación política corrigiera esas manifestaciones y entiende que “son disculpables porque tienen un enorme peso sobre cómo administrar este éxito y pueden caber tropiezos y declaraciones inoportunas por la presión o las dudas”.
Bazán se ha mostrado seguro de que “ahora, a Ángel y su equipo no les va a faltar voluntad para intentar buscar lo mejor posible” y asegura que “hay que disculpar ciertos errores en cuanto al tono”. En ese sentido, aboga por “olvidarnos de ciertos prejuicios e intentar actuar más en positivo” y que, por lo menos, ese pacto CV-PSOE-PRC “esté en la reflexión”.
En lo que se refiere al “componente principal”, que es ponerse de acuerdo en un programa, “no creo que haya problemas” pero “hay una tremenda historia personal que pesa sobre nuestras espaldas que es poner de acuerdo al hermano de Joaquín Díaz-Munío con el hijo de Lolín. Eso que podría ser un prejuicio, debería ser una oportunidad”. Considera que “el PRC castreño tienen un componente social y político que va mas allá del cabeza de lista, que llegó a conformar un grupo que a mí me da credibilidad”.