18 ABRIL 2017 /
La ONG castreña Una más Uno celebraba el lunes de la semana pasada una asamblea que, entre otras cosas, tenía como fin elegir una nueva directiva. Se presentó una única candidatura, encabezada por Kepa Gabancho que se convierte, por tanto, en el nuevo presidente del colectivo.
Con él y con la vicepresidenta, Maika Solano, hemos compartido unos minutos hoy en Castro Punto Radio. Gabancho ha asegurado que presentó candidatura “al no haber ninguna otra”. Hace unas semanas ya dijo que se postularía “si no había más gente interesada o si se presentaba una candidatura que entendía no era la mejor para los intereses de la ONG”.
Por delante esperan cuatro años “con mucha ilusión y muchas ganas de seguir haciendo cosas”. Tanto Gabancho como Solano están dispuestos a “seguir para adelante” después que nadie más haya mostrado interés en acceder a la Presidencia, pese a algunas voces críticas con la manera de funcionar del colectivo que habían surgido en los últimos tiempos. “Cuando alguien no está de acuerdo con algo, debe luche para cambiarlo y no dejar que se siga en esa tónica que se cree no es la adecuada. No obstante, visto lo visto estamos aquí”, ha asegurado la vicepresidenta.
A esto Gabancho ha añadido que “las discrepancias que haya podido haber con algunas personas no eran sobre temas muy difíciles de solucionar ni graves, y deberíamos haber sido capaces de sentarnos, hablar y tratar de solucionarlo porque allí ninguna personas sobraba y todos éramos válidos”.
Por lo demás, desde la directiva se ha hablado de los proyectos novedosos que se van a tratar de poner en marcha. El primero de ellos pasa por pedir los certificados correspondientes y seguir los pasos administrativos necesarios para que el colectivo pueda hacer contrataciones. “Tampoco es que vayamos a ser una empresa, sino que con uno o dos que contratemos al año nos podremos dar por satisfechos”.
El puesto más inminente a crear sería el de cocinero para el catering social, que va a incrementar su actividad, de tres a cinco días semanales. “Hay que aventurarse y dar pasos en esta dirección, siendo además una forma de ayudar a personas porque quien ocuparía el puesto tiene ciertas necesidades sociales”.
Por otra parte, el colectivo está en contacto con Asuntos Sociales “para buscar esa vía de la vivienda de emergencia para gente sin techo. Tenemos personas que igual están tramitando una ayuda social y les tardan 6 y 8 meses. A ver si creamos algo que les pueda dar techo durante ese periodo al menos”.
En pocos días los miembros de la ONG también comenzarán a plantar en el huerto de la Residencia Municipal. “Una parte de los productos irá para el propio centro de mayores y dos partes para nosotros”, ha explicado Solano.
Al mismo tiempo continúan con la campaña de recogida de ropa y material escolar para el pueblo Sirio y con la recogida de alimentos en los supermercados para surtir al banco que tiene la ONG.