La alcaldesa de Guriezo, María Dolores Rivero, ha dejado claro en Castro Punto Radio que el pago de la deuda que el Ayuntamiento tiene con proveedores desde mayo de 2021 a marzo de este año, “está sólo en manos de la secretaria interventora y del Tesorero. Habrá que preguntarles por qué no se ha comenzado a pagar cuando se han levantado los reparos y la parte que depende de los políticos está hecha”.
La alcaldesa ha estado acompaña por su asesor, Javier Iturbe, partidario de que “se comiencen a aplicar procedimientos disciplinarios de manera correcta para que los funcionarios, si por dejación de sus funciones, ocasionan un quebranto económico al Ayuntamiento, tengan responsabilidad patrimonial”. Y es que, “si esta gente a la que el Consistorio debe dinero lo reclama por vía judicial, vamos a perder y ser condenados en costas además”.
El levantamiento de reparos quedó resuelto en el pleno del pasado 31 de marzo, una sesión de la que la alcaldesa expulsó al portavoz del PRC, Ángel Llano. La propia Rivero ha explicado que, “desde el comienzo de la sesión, estuvo entorpeciendo, desobedeciendo, faltando al respeto e interrumpiendo. Todo ello, buscando que yo le echara para no estar en el pleno cuando se llegara al punto relativo a un procedimiento que está analizando el Tribunal de Cuentas y que afecta a Llano”. Como han explicado Rivero e Iturbe, siendo alcalde el regionalista entre 2019 y 2020, “pidió una serie de dinero a una empresas relacionadas con los montes. Cantidades que se iban a destinar a realizar la obra de la carretera de Las Nieves. Ese dinero, por mandato de Llano, se ingresó en la cuenta de otra empresa y no en la del Ayuntamiento. Pero es que, además, se anunció que las obras de la carretera las hacía finalmente el Gobierno de Cantabria. Se está investigando con qué motivo pidió ese dinero a las empresas cuando no hay ninguna razón legal para ello, dónde están esas cantidades y quién realizó finalmente los trabajos en la carretera de Las Nieves porque dice ahora el Gobierno regional que ellos no han sido”.
Al margen de este asunto, otra de las cuestiones en las que el Ayuntamiento está inmerso y que supone un importante problema económico, es la deuda con la empresa del agua, que se arrastra desde 2005, cuando arrancó el contrato. “La empresa elaboró en ese momento unos recibos que suponían un aumento de la cuota y el entonces alcalde ordenó que no se aplicara esa subida. En 2010-2011 el entonces equipo de Gobierno tuvo la maravillosa idea de modificar la ordenanza del agua por su cuenta y sin contar con la empresa, que lo llevó a los tribunales y ganó. Se obligaba al Ayuntamiento a establecer las tarifas iniciales y nunca se ejecutó la sentencia”. Con todo, “se reclaman al Consistorio más de dos millones de euros. Una cifra que supera lo que tiene el Ayuntamiento como presupuesto anual”.
En este contexto, “hace un año que pedimos a la Intervención un informe contable de las relaciones del Ayuntamiento con Inima Water sin haber recibido contestación”. Había que buscar “la forma de enfrentarse a esta situación” y, por eso, “se ha contratado a una empresa externa que determine si la deuda es la que reclama Inima y si ésta ha cumplido también sus obligaciones recogidas en el contrato”.
Para terminar, la alcaldesa remitirá hoy a los grupos políticos el borrador del presupuesto de 2022 y los de la ordenanza y reglamento del polideportivo. “El objetivo es que tengan tiempo para estudiarlo y poder convocar un pleno para el 28 o 29 de abril”.