Decenas de autocaravanas y de todo tipo vehículos de asistentes al macroevento musical se ven obligados a estacionar día y noche en una de las áreas de aparcamiento más grande de la ciudad, con el consiguiente perjuicio a clientes y empleados de la superficie comercial, donde no hay un sitio libre todo el día.
La falta de habilitación de zonas de aparcamiento alternativo por parte del Ayuntamiento de Castro Urdiales para este tipo de eventos provocan estos colapsos que se repiten en áreas residenciales como Brazomar, Cotolino o Sámano.