La Guardia Civil de Cantabria continúa intensificando sus actuaciones en el municipio de Castro Urdiales, donde “los delitos que causan mayor alarma social entre la población continúan disminuyendo en 2021”.
Así lo ha puesto de manifiesto este martes la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, en la Junta Local de Seguridad de Castro Urdiales que se ha celebrado en el Ayuntamiento y que ha presidido junto a la alcaldesa, Susana Herrán.
En la reunión también han participado el coronel jefe de la Guardia Civil de Cantabria, Luis del Castillo, junto a otros mandos de este Cuerpo de la Policía Local.
En el balance de seguridad, se ha recordado que en Castro Urdiales se cerró el año con una tasa de criminalidad del 42,7 al aumentar las infracciones penales conocidas en un 7,6%.
Ahora bien, “si se analiza la actividad delictiva teniendo en cuenta la población vinculada, la que no estando empadronada reside en el mismo, así como los que se desplazan por otros motivos, dicha tasa se reduce a 27,92 infracciones penales por cada 1.000 habitantes, tasa que se ajusta más a la realidad existente en la localidad y que estaría por debajo de la de Cantabria, que se situó en 28,5 en el año 2020”.
Aunque el número de delitos experimentó un repunte el pasado año, conociéndose 97 más que en 2019, “hay que apuntar que la principal causa de ese ascenso fueron las estafas relacionadas con internet, tarjetas bancarias, etcétera, cuantificándose su ascenso en 128 delitos más”.
De esto, “se deduce que los delitos que verdaderamente causan alarma social han descendido, como se puede ver con el análisis según los diferentes tipos delictivos”.
Por lo que respecta a los delitos contra el patrimonio, descienden los robos con fuerza en vivienda un 13%, los robos con violencia e intimidación un 8%, los hurtos un 12,5% y los daños otro 13%.
En cuanto a los delitos contra las personas, descienden un 5,5%, siendo significativa la caída de los relacionados con la libertad sexual, con una rebaja cercana al 58%, y las lesiones y riñas tumultuarias graves se reducen un 7%.
En cuanto a las actuaciones de la Guardia Civil para hacer cumplir las diferentes normativas administrativas, los agentes formularon más de 2.900 denuncias en 2020, lo que significa un aumento del 278% en comparación con 2019.
Este aumento “se debe principalmente al trabajo realizado para evitar la propagación de la COVID-19, así como las actuaciones realizadas en la zona de ocio”.
En estas actuaciones destacan las más de 1.000 denuncias por desobediencia, resistencia o falta de respeto a los agentes, casi 500 denuncias por el no uso de la mascarilla, más de 400 por incumplir los confinamientos en sus diferentes modalidades (límites geográficos, horario nocturno, etcétera), más de 380 por la tenencia o consumo de sustancias estupefacientes, así como casi 150 denuncias por la realización de botellones.
SITUACIÓN EN ENERO Y FEBRERO DE 2021
Analizada la situación actual de la seguridad ciudadana en Castro Urdiales, en los meses de enero y febrero se observa que “continúa disminuyendo, con un descenso del 72% de los robos con fuerza en viviendas, una caída del 33% de los robos con violencia e intimidación y una disminución del 30% de los hurtos”.
Por el contrario, las estafas cometidas con el uso de las nuevas tecnologías mantienen la misma tónica del año pasado, conociéndose en tan solo dos meses 46 delitos más, lo que supone un ascenso superior al 300%.
“Es importante destacar que, en este periodo de dos meses, las denuncias por delitos de lesiones presentan un descenso del 40%, que en buena parte es debido a las actuaciones que la Guardia Civil realiza en la zona de ocio de Castro Urdiales”.
Estas actuaciones, así como otras que tienen continuidad para evitar la propagación de la pandemia, “hacen que en estos dos meses las denuncias hayan experimentado un ascenso superior al 300% en comparación con los dos primeros meses del año 2020”.
Entre ellas, hay que destacar las más de 100 denuncias por no respetar los confinamientos provinciales y limitaciones en horario nocturno, 51 denuncias a establecimientos y clientes, principalmente por incumplimiento de las medidas sanitarias para frenar la COVID-19, así como 30 por botellón, entre otras.