La actividad hostelera va recuperando poco a poco la actividad. Es el caso del bar restaurante La Gaviota, que hoy ha abierto sus puertas en La Correría. Su responsable, Francisco San Emeterio, comentaba en Castro Punto Radio que “la cosa va muy despacio pero estoy animado porque veo que la gente tiene ganas”.
De momento, estos establecimientos pueden habilitar un 50% de sus terrazas pero, a raíz de la iniciativa del Ayuntamiento para ampliar estos espacios, los hosteleros podrán distribuir las mesas que ya tenían en una zona más amplia para mantener las distancias de seguridad.
San Emeterio aseguraba que ya tenía la terraza llena en este primer día, aunque con las medidas correspondientes. “Yo creo que la gente está muy concienciada”, apuntaba, al tiempo que explicaba cómo han organizado el servicio, colocando una mesa en la puerta donde los clientes recogen la consumición y tienen acceso a gel desinfectante.
Sobre las conversaciones que los castreños mantienen en estos ratos de terraza, el propietario de La Gaviota nos contaba que “todo el mundo habla de lo mismo”, en referencia al coronavirus, las mascarillas, la gestión del Gobierno o el comportamiento de la gente.
Este primer día “todo fluye de maravilla y estoy muy satisfecho. Sobre todo hemos servido cafés y tortillas”.Hace unas semanas comenzaron con el servicio a domicilio, que se va a mantener porque “ya hay una clientela”. De cara a una siguiente fase, indicaba que “cada uno tendremos que estar de policías en nuestro negocio para que la gente guarde las distancias”.
COMERCIO
En cuanto al comercio local, que también ha comenzado a abrir desde ayer, percibe que “la gente tenía ganas de salir y hacer una vida relativamente normal”. José Antonio Pedrosillo, propietario de Zona Sport, señalaba que abrieron con nervios e incertidumbre pero los clientes “entendieron perfectamente la situación, respetaron las distancias, esperaron y se lo tomaron muy bien”.
Las medidas de seguridad implantadas en la tienda responden a lo indicado por las autoridades sanitarias, como la distancia de seguridad, el control del aforo, la recomendación de utilizar mascarilla, los geles desinfectantes en la entrada o el uso de una persona por cada probador. En cuanto al tratamiento de las prendas, si una persona las prueba, “las dejamos en un perchero en el almacén y en cuarentena 48 horas”, además de utilizar un sistema de desinfección que no las dañe.
Según las indicaciones de esta Fase 1, los establecimientos tienen que habilitar horario con servicio prioritario para mayores de 65 años. Si estas personas acuden al comercio, se les deja acceder antes que a otros clientes. Pedrosillo se ha mostrado agradecido porque “la gente está muy concienciada y nos facilita mucho el trabajo”.
En el caso de Zona Sport, especializado en ropa y complementos deportivos, su responsable comentaba que, sobre todo, se está vendiendo calzado para la práctica del deporte.