La incidencia de gripe en Cantabria continúa la tendencia descendente de las dos últimas semanas, con un 25% menos de casos registrados. Así, durante la semana dos del año (del 8 al 14 de enero), la tasa de incidencia se ha situado en 217,3 casos por 100.000 habitantes, lo que supone que la onda estacional está en claro retroceso.
El número total de nuevos casos de gripe declarados en Cantabria por el sistema de vigilancia de las infecciones respiratorias agudas es de 1.280 (un 25% menos que la precedente). Además, la hospitalización por gripe ha descendido un 44%, hasta los 87 casos, de los que solo un 23% son ingresos graves.
En este sentido, tal y como ha informado la directora de Salud Pública, María Isabel de Frutos, en aplicación del principio de prudencia, aunque los datos son buenos, Cantabria mantendrá unos días más el uso obligatorio de mascarilla en centros de salud y hospitales.
“Vamos a darnos un margen razonable y de seguridad para quitar la obligatoriedad de las mascarillas”. En los próximos días, si la evolución sigue así, se revertirá la medida, ha explicado.
Respecto al resto de virus en circulación, se mantiene también el descenso general de la incidencia de Infecciones Respiratorias Agudas (IRA), con un 7% menos de casos que en la semana anterior.
El Virus Respiratorio Sincitial (VRS) se mantiene estable, puesto que, tal y como reflejan los datos, la onda epidémica alcanzó los valores máximos a principios de diciembre, pero aún no desaparece del todo, con una incidencia alrededor del 50% de los valores máximos que registró en el pico de la onda.
El COVID-19 también permanece estable, con cierto nivel de circulación, pero sin niveles importantes de incidencia (69,7 casos por 100.000 habitantes, un 4% menos que la semana anterior), ni incremento de hospitalización (55 pacientes ingresados).