La Policía Local de Castro Urdiales intervino durante la pasada Semana Santa en varios incidentes de hurtos y seguridad del tráfico, según informan en un comunicado.
El más grave tuvo lugar ayer martes por la tarde, cuando un individuo fue detenido por un delito de robo con fuerza y por otro de atentado contra los agentes de la autoridad.
Todo empezó con el robo de un quad en Mioño, a donde acudió una patrulla a investigar. El vehículo policial fue arrollado por el vehículo, en el que viajaban dos personas, y después el conductor atropelló deliberadamente a uno de los policías, pasando una rueda sobre su pierna. Estos individuos habían utilizado para llegar a Mioño, una moto también robada, con la que habían huido de un atraco en una vivienda.
Por otro lado, la Policía intervino en la madrugada del 23 de abril en un hurto que tuvo lugar en el Albergue Municipal de peregrinos, deteniendo al responsable; y también denunció un delito contra la seguridad del tráfico que tuvo lugar el domingo por la noche, debido a un individuo que superaba la tasa de alcoholemia permitida.
Estas son solo algunas de las actuaciones de la Policía Local, que en el mismo fin de semana intervino en un intento de suicidio, un caso de posible violencia de género, dos sucesos de daños a vehículos, una incidencia con una lonja por problemas de ruidos y retirada de grupos de jóvenes del Barrio de los Marineros, además del habitual control del botellón, horarios de pubs, discotecas, cafeterías y terrazas. Hubo una denuncia administrativa por golpear papeleras, otra por orinar en la calle, una por trabajos de construcción en festivos y otra por dejar destapado un contenedor de obra.