Primer día de incorporación a los Jueveros de los puestos de textil, con lo que el mercadillo recupera la ‘nueva normalidad’ después de varias semanas en las que únicamente han estado operando los puestos de alimentación.
Los mercaderes vuelven al trabajo con ganas, como ellos mismos han señalado en declaraciones a Castro Punto Radio, y adaptándose a todas las normas de seguridad. El mercadillo tiene nueva distribución para garantizar un mayor espacio entre los puestos. Se ha dispuesto una entrada, con dispensadores de gel hidroalcohólico y un trabajador controlando accesos. Las salidas del recinto están instaladas en varios puntos.
Los establecimientos de alimentación están separados del cliente con un vallado que establece una distancia de metro y medio con el producto. En los de textil, se pide que las prendas se prueben en casa y, “si no les gusta o les sirve, que las devuelvan a la semana siguiente para ponerlas después unos días en cuarentena”.
Satisfacción entre los mercaderes por la recuperación de esta ‘nueva normalidad’, muy deseada entre ellos después de meses complicados y teniendo en cuenta que el de Castro, como han dicho, ha sido el último de Cantabria el volver a funcionar al 100%.
Ahora esperan que los castreños vuelvan poco a poco al mercadillo y mantienen la incertidumbre sobre cómo responderán los clientes a partir de ahora, teniendo en cuenta que “hay gente que está pasando muchas dificultades económicas, que se ha quedado sin trabajo o está en ERTE”.