Javier López Orruela nos propone hoy una ruta, dentro de los límites del municipio castreño, para disfrutar del paisaje otoñal y los vestigios de la antigua actividad minera en el barrio de Talledo y el espectacular hayedo de La Bernilla.
Un recorrido circular de 3 kilómetros, sin apenas dificultad, que podemos realizar en dos o tres horas. El punto de partida está en Talledo, el barrio de la Junta Vecinal de Ontón que es, además, el más alto del municipio, a 290 metros de altitud. Desde su cementerio, tomamos una pista con cierto desnivel que nos permite observar el antiguo lavadero y el manantial. A medida que avanzamos se abren vistas al Valle de Otañes, Santullán y Cerredo entre otros puntos.
Conectando con una segunda pista, frente a una antigua vivienda que formaba parte del complejo de la explotación minera, caminamos flanqueados por robles centenarios hasta llegar a las “bordas”, pequeñas casitas destinadas al pastoreo. El camino desciende y nos lleva hasta el barrio de Baltezana y el hayedo de La Bernilla, el principal destino de esta ruta. La hojarasca depositada en el suelo, la paleta de colores otoñales y la presencia de aves lo convierten en un enclave de gran belleza.
Para concluir el trayecto, regresamos a las bordas y volvemos a Talledo por otro de sus accesos.
A continuación os mostramos imágenes de la ruta y sus correspondientes planos.