23 JULIO 2015 /
El empresario Jon Loroño, propietario de Promociones Paraíso, ha mostrado en Castro Punto Radio su satisfacción por haber escriturado el primer piso de la zona de Santa Catalina, la famosa Unidad de Ejecución 1.34, desde que se ha desbloqueado judicialmente:
“Este tema lleva cinco o seis años, y lo hemos pasado muy mal, pero todos, no solo los promotores, también los vecinos, los negocios del pueblo… Se ha cortado una calle, parece que pasaba un río como el Guadalquivir debajo de los edificios, que si faltan metros… al final los jueces me dieron la razón y la primera ocupación, y ya se puede escriturar”, indicaba.
Sobre otras zonas, como Cotolino y La Loma, también muy vigiladas urbanísticamente, “lo tienen que decir los jueces, pero al final pasará lo mismo, se dará carpetazo a toda esta historia”, decía Loroño, que “no ve causa” en este tema, lamentando que “hay gente arruinada, en tratamiento psiquiátrico”. Según el gerente de Inmobiliaria Izarra, a los promotores les han dado permiso de obra con informes técnicos y jurídicos que lo avalan, “y yo conozco muy bien a los técnicos, y aquí no mueven un hilo si no hay aguja. Otra cosa no habrá en Castro, pero hay buenos técnicos”.
Loroño también rompía una lanza en favor de los políticos: “no son arquitectos, y han firmado cosas con informes favorables”.
La paralización de la construcción por motivos sobre todo judiciales, a juicio de Jon Loroño, “ha sido un golpe para todos: tiendas de decoración, de ropa, bares, inmobiliarias… se ha destruido mucho empleo, muchos locales con la persiana abajo”, recordando el supermercado que iba a abrir El Corte Inglés en la misma zona de Santa Catalina, y que se ha ido al no poder esperar: “ha sido un palo para este pueblo, con la que está cayendo”.
Recordaba el responsable de Promociones Paraíso la imposibilidad del Ayuntamiento de vender las parcelas de Cotolino en dos subastas consecutivas: “nos podemos remontar a lo que ha ocurrido con el aeropuerto de Ciudad Real, que un chino lo compra por diez mil euros… pero es que aquí no dan ni cero céntimos, ya que la gente no quiere invertir en Castro, este pueblo no se merece tanto escándalo”.
Lo mismo comentaba sobre otras empresas anunciadas por gobiernos anteriores: “estos han vendido humo, aquí venía un señor de Santander a poner la primera piedra… que quieren, ¿construir una pirámide?.., pero si no hay más que baches, que empresa va a venir aquí”, se quejaba el empresario.
Las críticas de Jon Loroño también eran para los impuestos: “lo que aquí se paga de IBI no se paga ni en la Quinta Avenida de Nueva York, pero no hay inversiones ni nada”.
Como posible solución a la paralización que el constructor cree que existe, proponía una agilización y abaratamiento de los trámites burocráticos para invertir en la ciudad: “hay que bajar un 50% las tasas de obras, la mayor y menor; pero en las reformas, no pagar tasa, que no se hace ni en Madrid, solo se paga el contenedor”, y en cuanto a plazos para abrir negocios, “las licencias de obra se deben conceder entre una y dos semanas, ahora hay casos que tardan más de 4 años. Así no se puede funcionar”.
Sobre el nuevo gobierno municipal CV-PSOE, Jon Loroño cree que “peor que los anteriores no lo pueden hacer. No he hablado con el alcalde, pero espero bastante más de estos señores que de los anteriores, que no hagan tantas bobadas, como el Centro de Raqueta, dejar el marrón del Instituto de Cotolino a estos…”, concluía tajante el gerente de Inmobiliaria Izarra.
En este enlace se puede escuchar la entrevista completa al empresario: