Tras la Comisión Informativa de Medio Ambiente de ayer jueves, la concejala del área, Virginia Losada, ha detallado algunos de los asuntos tratados en la reunión. Uno de ellos es la implantación del contenedor marrón (restos orgánicos) en el municipio que, “en comparación con otras comunidades autónomas, Cantabria lleva más lenta. La posible causa de este retraso es la planta de Meruelo donde se depositan los residuos domésticos, por el hecho de no estar preparada para recibir este tipo de basura”.
La empresa MARE será, dice, la encargada de gestionar este proyecto y “se espera que se implante en el segundo semestre del año, ya que los camiones llegan en junio”. Todos los contendedores se instalarán junto a las paradas que contengan depósitos azules y amarillos “para facilitar las recogidas”, ha afirmado. Además, existirá la modalidad de la recogida de basuras en hogares “únicamente unifamiliares”, aclara, y que, tendrán que ponerse en contacto con la empresa en el caso de estar interesados.
Asimismo, otro de los asuntos ha sido el proyecto piloto del servicio “puerta a puerta” de vidrio para los bares de Castro Urdiales. Esta idea, declara, “ha surgido después de un cúmulo de quejas de vecinos en la zona de la calle Torre Vitoria”, y cree que “se llevará a cabo a partir del 3 de marzo, comenzando por la Avenida de la Constitución, la Plazuela y terminando en la calle la Rúa, desde la Peluquería Agapito hasta el bar Kaloka, aproximadamente. La intención es facilitar la vida a la hostelería, arrancando la recogida dos días a la semana, de momento y dependiendo de la necesidad”, ha apuntado Losada.
El censo de emplazamiento de instalaciones que tiene amianto en el municipio ha formado parte también orden del día. Según Virginia Losada, se han localizado a través de teledetección, 97 edificios públicos y 3.494 privados que lo contienen. “El procedimiento sujeto a la Ley de Residuos de Suelos Contaminados, que se publicó en 2022, obliga al consistorio a retirar todo este material, tanto de construcciones públicas como privadas”.
Por otro lado, “ya se ha presentada la candidatura para conseguir, un año más, la Bandera Azul para las playas de Brazomar, Ostende y Oriñon. La responsable del área ha querido aclarar, tras comentarios que “he escuchado que el ayuntamiento paga para tenerlas”, que “para poder optar a esta bandera, hay que abonar 500 euros por playa (un total de más de 1.500 con IVA incluido), además de rellenar muchos documentos y cumplir requisitos”.
En cuanto al control de población de avispa asiática, “sigue siendo un problema y continuamos necesitando controles y medidas”. La concejala ha confirmado la adjudicación de la empresa que será contratada para erradicar esta plaga, que “será la misma que viene haciéndolo años atrás y, a partir de marzo se instalarán los botes con líquido repelente para evitar que estos insectos críen”.
Imagen del Astillero Galafate, un edificio con amianto en pleno casco histórico castreño.