Los médicos del sistema sanitario público nacional, entre ellos los de Cantabria, han convocado una huelga en toda España para el próximo 23 de mayo en respuesta a la propuesta del nuevo Estatuto Marco que no ha derivado en ningún acuerdo por parte del colectivo sanitario.
Tal y como ha explicado en Castro Punto Radio el secretario general del Sindicato Médico de Cantabria, Óscar Pascual, podría tener “graves consecuencias profesionales” para su sector. La convocatoria surge tras dos años de reivindicaciones y negociaciones con el Ministerio de Sanidad que, según el secretario, “hasta ahora, no han dado resultados satisfactorios en las dos reuniones poco fructíferas que hemos mantenido”.
Pascual ha descrito que el actual Estatuto Marco, instaurado en 2003, “necesita ser reformado” para reflejar las realidades que a las que se enfrenta la profesión médica en la actualidad. Sin embargo, “el borrador presentado en enero de este año por la ministra de Sanidad aleja a los médicos de los acuerdos negociados previamente y plantea condiciones que podrían perjudicar gravemente a los profesionales de la salud”, apuntaba Pascual.
El nuevo estatuto implica cuestiones el colectivo médico como las siguientes:
Reclasificación de profesionales: “engloba a todas las profesiones que requieran una carrera universitaria en una misma categoría sin distinguir entre grado (Enfermería, Fisioterapia, etc.) y máster (Medicina), sin reconocer tampoco la especialización a la que estamos obligados para ejercer. Esto llevará a corto plazo a una igualdad salarial con colectivos profesionales a los que se les exige la mitad o menos de nuestra formación y por lo tanto, muchísima menos responsabilidad”.
“No se puede unir en un mismo grupo a profesionales que nada tiene que ver entre sí. Un enfermo no llega a un tercio su formación, comparándola con la de un médico”, manifestaba como ejemplo Óscar Pascual.
Movilidad forzosa: Hasta ahora, en Cantabria es voluntaria e incentivada, “eso desaparecerá y nos podrán mover libremente entre hospitales o centros de salud”.
Aclaraba Pascual que “tenemos dos tipos de jornada; la ordinaria y complementaria. En esta última se cobra menos que en la ordinaria, no computa para la jubilación, pero cualquier médico se puede pasar su jornada laboral en guardias. Hay compañeros en el Hospital Comarcal de Laredo que están doce días completos a lo largo del mes, más sus jornadas ordinarias, es algo que no debería permitirse desde el punto de vista de salud laboral”, manifestaba el médico.
Por todo lo anterior, el Sindicato Médico de Cantabria apunta que existen “guardias sin reconocimiento de la libranza como tiempo trabajado, sin reconocimiento a efectos de jubilación, sin pagar como horas extras, pero con unos máximos en la duración de las mismas que nos obligará a estar más días de guardia, pero con menos horas”. Además, “se mantiene nuestra jornada máxima de 48 horas semanales cuando en los últimos años se está yendo a una de 35 horas para el resto de trabajadores”.
La exclusividad obligatoria es otro de los puntos que causa que “todos nuestros compañeros que terminen su residencia deben trabajar en exclusividad en el sector público”, lo que limita sus opciones laborales y “lo cual permitirá ofrecer contratos precarios que estaremos obligados a aceptar”.
En cuanto a las jornadas laborales, asegura “no ver avances, ni parece haber ganas de ello”. Además, critica el aumento en la carga horaria, que podría obligar a los médicos a trabajar hasta 90 horas en semanas específicas, “siempre y cuando la media en cuatro meses sean 48 horas”, incidía Pascual, que cree que, con esta situación, “podría resultar dramática la fuga masiva de profesionales hacia otros países, aumentando la ya crítica escasez de médicos en el sistema público”.
“En España, un médico trabaja 24 horas seguidas y a las cuatro de la mañana está atendiendo urgencias vitales después de 20 horas. Es algo que tarde o temprano tendremos que solucionar. Todos nosotros, yo el primero, tenemos recuerdos de actuaciones que, brillantes no hemos estado, debido al cansancio. Todos”, destacaba.
En cuanto a la previsión de la participación en la huelga convocada para el próximo 23 de mayo, “desde mi sentir y el de mis compañeros”, indicaba Pascual, “en hospitales puede ser muy seguida”.
La próxima reunión entre sindicatos y Ministerio de Sanidad está programada para el 19 de mayo, pero las expectativas de un avance efectivo “son bajas. Nos estamos enfrentando a la huelga que menos me ha gustado hasta ahora. No hay ni oportunidad de entendimiento”, expresaba.
El secretario general del Sindicato Médico de Cantabria finalizaba lanzando una pregunta: “¿cómo vas a convencer a un niño para que estudie Medicina si en cuatro años, cursando Enfermería, va a ganar lo mismo que en doce (seis de universidad, la obligación del MIR y la residencia)? Tenemos un problema muy serio y las retribuciones no deberían de ser iguales. Esto, en Bélgica no es un problema, en Inglaterra lo mismo, porque