La alcaldesa de Castro Urdiales, Susana Herrán, se ha mostrado indignada en los micrófonos de Castro Punto Radio tras la reunión del Patronato de la Fundación Barquín Hermoso celebrada esta mañana en Santander, a la que ha acudido como miembro del Patronato, y en la que se ha notificado la intención de la fundación de cerrar el Colegio El Pedregal al final de este curso, tal y como adelantó ayer esta emisora, al haber finalizado en 2024 el contrato que tenía suscito la propiedad con la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria.
Herrán ha hecho un llamamiento “con toda la rabia que tengo en este momento para que todos los castreños sepan lo que está pasando y que nos movilicemos hasta el final” para evitar el cierre del centro educativo.
“Os lo pido de corazón, vamos a frenar a este gobierno del Partido Popular, que está desmantelando la sanidad y la educación pública”, expresaba la alcaldesa, que, tras acabar la reunión de esta mañana se ha puesto en contacto con la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga “para trasladarle la preocupación como alcaldesa por este asunto y poner freno a esta desfachatez”.
La alcaldesa se ha remontado al pasado mes de diciembre, cuando la Fundación convocó una reunión “de una manera extraña, ya que no se adjuntó la documentación de lo que se iba a tratar, lo que es obligatorio, y me citaron de forma distinta a las anteriores, con asistencia telemática, cambiando el formato de las convocatorias. Como no podía hacerlo, no me dejaron la posibilidad de delegar en una concejala, en este caso Nereida Díaz, diciéndome que mis votos en la reunión debería delegarlos en otra persona asistente, lo que no es regular”.
En la reunión de esta mañana, al tratarse el primer punto del orden del día, que era la lectura del acta de aquella convocatoria de diciembre, Herrán comprobó “que se había falseado, ya que aparezco yo como asistente, que no estuve, y en el primer punto se recogía mi voto, lo que es imposible”.
En el acta del segundo punto de aquella cita de diciembre, que era la finalización del contrato de la Fundación respecto al Colegio El Pedregal, “dice que me abstengo, e incluso en el apartado de ruegos y preguntas indica que yo hice una. En la reunión de hoy he puesto de manifiesto que esta acta es falsa y está alterada, ya que ni participe ni voté”.
La alcaldesa se está planteando impugnar la convocatoria de aquella cita “por ser absolutamente irregular”, e incluso “denunciar al secretario que levantó el acta por falsedad documental”.
Volviendo a la reunión de esta mañana, “hemos hablado del punto de la resolución del contrato de arrendamiento que tiene la Consejería con la Fundación Barquín Hermoso para la presencia del Colegio El Pedregal en ese inmueble”
“La fundación pide rescindir el contrato ya que tiene pérdidas en sus cuentas anuales. Es indignante que en una ciudad como Castro Urdiales”, señalaba la alcaldesa, “la Consejería pretenda vender la educación de nuestros niños por una situación económica de pérdidas de la fundación, cuando existen otras fórmulas”.
A las preguntas de Susana Herrán sobre cuál es el uso que se pretende dar por parte de la fundación al edificio, “me ha costado mucho arrancárselo, y tras insistir, han dicho que están en conversaciones con una empresa de Madrid para que niños y niñas puedan venir en periodo estival a realizar actividades náuticas. Se está vendiendo la educación a una empresa privada”.
La segunda justificación que le han dado para el cierre del colegio a la alcaldesa en la cita de esta mañana “es que no hay niños suficientes, lo que no es cierto. Los padres castreños han podido ver que este curso se les negó inscribirse en El Pedregal, con lo que esto ya estaba más que pensado. El hecho es que el gobierno del Partido Popular quiere vender nuestra educación a una empresa por una cuestión económica”, y se preguntaba “en pleno siglo XXI, ¿a quién se le ocurre cerrar un colegio público?”.
“Es absolutamente indignante e inconcebible”, apostillaba la regidora, “que argumenten que la natalidad está bajando… ¿y si sube? Nos quedamos sin plazas educativas”.
Concluía la alcaldesa indicando que “esta fundación, desde que se fundó y sus herederos tienen la obligación de que sus fondos fueran destinados a niños con algún problema de discapacidad y educativo. Este es el fin de la educación, que debería ser sin ánimo de lucro y la fundación tiene que cumplir el objetivo por la que fue fundada, la educación. No la especulación del edificio. La consejería paga de alquiler 20.000 euros al año. ¿A alguien le cabe en la cabeza lo que le supone a una consejería 20.000 euros en un año?”.