14 JUNIO 2018 /
Desde este mediodía se ha desviado el paso de peatones que discurría bajo los soportales del Hotel Miramar, y a partir de ahora caminarán por un tramo del carril-bici, que pierde esa condición, con lo que los ciclistas compartirán calzada por unos metros con los vehículos a motor.
Las obras, que durarán unas cuatro semanas, las ejecuta la Demarcación de Costas en Cantabria por petición del Ayuntamiento de Castro, y durante las mismas se asegurará la fachada del Hotel Miramar, evitando que las personas corran peligro por su situación de deterioro, especialmente por la rotura y desprendimiento de los ventanales.
Se ha dejado un margen de 5 metros de ancho en la zona de la playa y de 1,5 metros en la fachada sur (la puerta de entrada al antiguo hotel). Además, se están cerrando todas las ventanas existentes en la planta baja y las de la fachada norte, en el resto de plantas, con paneles de madera, y se demolerán las plaquetas de revestimiento que se encuentren sueltas o deterioradas.