El Consejo Rector de la Residencia Municipal de Castro Urdiales ha adjudicado a la empresa Royecón Galicia S.A. el contrato para ejecutar las obras de reforma del edificio del antiguo Santo Hospital Civil.
El importe de la adjudicación asciende a 411.885 euros sin impuestos, 498.381 en total, al tratarse de la oferta más económica de las tres presentadas a la licitación. El presupuesto base del concurso era de 520.090 euros, impuestos incluidos.
El plazo de ejecución de las obras es de cuatro meses, y consisten en lo siguiente:
Dada la alta presión de ocupación del edificio y para hacer viable la reordenación de usos, se adopta la solución de extraer las instalaciones de producción de calor y trasladarlas fuera del edificio. Al trasladar la sala de calderas al edificio de servicios y almacén general del vértice suroeste de la parcela, se hace viable reorganizar los usos y zonificarlos en función de su carácter. Centralizar la producción de calor y agua caliente sanitaria en el espacio vacante del edificio anexo del jardín aleja el riesgo potencial que conlleva la sala de calderas y optimiza el rendimiento de las calderas al hacerlas trabajar en serie. Este desplazamiento abre la posibilidad de reordenar el programa y clarificar las circulaciones para mejorar la eficacia del servicio y evitar interferencias indeseadas.
Se crea una zona de servicio al oeste de manera que sea accesible directamente desde el exterior y quede fuera de la circulación de residentes. La cocina y sus anexos renovados ocupan el espacio acotado al oeste. La lavandería se traslada al espacio enfrentado a la cocina al otro lado del pasillo central.
En el vestíbulo de la capilla, espacio vertical vacío, enfrentado al montacamillas existente se prevé un segundo montacargas con desembarco en vestíbulo lateral respecto a pasillo central y enfrentado a lavandería.
Esta disposición de las áreas de servicio junto con la previsión de un montacargas de servicio segrega la zona de acceso restringido respecto a las zonas de circulación libre de residentes.
La traslación de las instalaciones y de la lavandería libera el patio. Se eliminan todos los añadidos y la cubierta ligera que cierra la planta baja, recuperando la ventilación natural y la iluminación directa para las habitaciones de patio.
Se genera un eje transversal que abre y conecta las estancias principales de planta baja: sala comedor al sur, patio central, pasillo y capilla. El estar desplazado por la ocupación de la nueva lavandería se traslada al centro del patio configurado a modo de invernadero. Se trata de dotar de protagonismo central al que entendemos debe ser el corazón del edificio.
La clarificación de las circulaciones se complementa con la eliminación de la habitación del fondo de pasillo para ubicar en su lugar la recepción de manera que no bloquee el paso de luz natural al pasillo y sirva de dominio efectivo sobre el acceso principal, el vestíbulo, el pasillo central y el desembarco del montacamillas.
El desplazamiento de la recepción permite abrir el paso directo desde el vestíbulo principal al vestíbulo de la capilla de manera que los asistentes a los oficios religiosos acceden de forma directa sin interferir en las zonas privadas de los residentes.
Como acción complementaria, se redistribuye la zona de administración para incluir una sala de reuniones y visitas, necesaria según normativa vigente.
En el centro de la planta, en paralelo al paso al patio, se prevé una dotación de aseos comunes que queda equidistante de todos los espacios comunes de la planta. La dotación de aseos comunes y la recepción suponen la eliminación de dos dormitorios en planta baja.