4 FEBRERO 2019 /
El concejal del PSOE, Alejandro Fernández, comenzó a aplicar la ordenanza relativa al Informe de Evaluación de Edificios en el año 2015, cuando era concejal del Vivienda. Tras la ruptura del pacto de Gobierno, cree que CastroVerde “ha funcionado en este aspecto por la inercia de lo que se dejó hecho antes. Todo lo nuevo, en cuanto a exigir obras, ejecuciones subsidiarias y más órdenes de ejecución, se ha ralentizado”.
En declaraciones a Castro Punto Radio, ha lamentado que “el equipo de Gobierno no nos ha dado nada de información en materia de Vivienda. Hemos intentado, por activa y por pasiva, recabar datos en las comisiones informativas, pero nunca se han llevado a estas reuniones temas de vivienda. Es más, el concejal encargado del área, Eduardo Amor, no acude a las comisiones en las que se debe tratar este tema”.
Tanto es así, que Fernández ha asegurado que “para abril de 2017 (menos de la mitad de la legislatura), yo salí con 71 órdenes de ejecución de obra dictadas y, desde esa fecha hasta el día de hoy, hay poco más de 110. Ahí se puede ver el descenso en el ritmo, cuando no son menos los inmuebles que han tenido que pasar las inspecciones. En 2015 eran 185, en 2016 fueron 16 y en 2017 estábamos empezando a exigirlo a otros 84. Este equipo de Gobierno ha tenido que gestionar 150 correspondientes a 2017 y 2018 y hay 40 órdenes de ejecución. Dudo que sólo haya habido 40 informes negativos o que todo el mundo haya empezado las obras”.
El concejal del PSOE, ha recordado que deben pasar el Informe de Evaluación de Edificios aquellos inmuebles colectivos que tengan más de 50 años. En diciembre de 2014 se aprobó la ordenanza que regulaba este asunto, pero “no se estaba aplicando”. Por eso, en junio de 2015, cuando Fernández se hizo con las riendas de la Concejalía, “tenían que haber pasado la inspección los edificios de más de 100 años y no se había hecho nada. En septiembre de 2015 se aprobó el primer censo anual de aquellos inmuebles que debían presentar el Informe de Evaluación: los de más de 100 años, añadiendo también a los de más de 80 para ponernos al día”.
Ha reconocido que, la notificación a los propietarios, “a veces es complicada, teniendo en cuenta que en muchos edificios no está creada ni la Comunidad de Propietarios. Por tanto, se trata de avisar a todos o hacerlo con uno y controlar después que ejerza de representante y se lo traslade al resto”.
Desde que se recibe por parte del Ayuntamiento el escrito en el que se informa al propietario de la necesidad de que su edificio pase la inspección, “en base a la ordenanza, tienen hasta el 31 de diciembre del año en curso”. Sin embargo, “sobre todo en los primeros meses de aplicación de la Ordenanza, no se era tan exigente con los plazos ya que la gente tenía que adaptarse a algo que era una novedad, sobre lo que tenían muchas dudas y que nunca se había pedido”.
El proceso que lleva a cabo el Ayuntamiento consiste en “notificar una primera vez la obligatoriedad de pasar el informe. De no hacerse, se remite un segundo escrito advirtiendo de la posibilidad de recibir una sanción urbanística. Si continúan sin cumplir con la ordenanza, el Ayuntamiento realiza el Informe de forma subsidiaria”.
Es lo que sucedió con el edificio de La Plazuela con Torre Vitoria, cuyos bajos comerciales están clausurados desde el sábado 26 de enero, por riesgos en la estructura.
Según aseguró el alcalde a esta emisora, en el Informe de Evaluación de Edificios, de julio de 2018, ya se detectaron las deficiencias. Fernández desconoce el contenido concreto de ese informe, pero ha dicho que “si se indicaban riesgos, habría que acometer medidas en un plazo de tres o cuatro días. Dar las correspondientes órdenes de apuntalar si es necesario, para que se proceda a redactar el proyecto de obra”.
En el caso de que el Informe de Evaluación de cualquier edificio sea negativo y haya que acometer obras, los propietarios tienen también un plazo concreto para ello. “Es el Ayuntamiento el que tiene que controlar si esos trabajos se llevan a cabo y, de no hacerse, emitir órdenes de ejecución y, en última instancia, encargarse de las obras de forma subsidiaria”.