El Ayuntamiento ha procedido a realizar la instalación de un sistema de protección de la zona de la Playa del Matadero, ubicación en la que tradicionalmente se sufren los mayores embates de la fuerza del mar en los meses de otoño e invierno.
La actuación consiste, como explica la concejala del área, Nereida Diez, “en la instalación de bloques de hormigón homologados de 80 centímetros de altura y un metro de anchura, y un peso de una tonelada cada uno”. Es un sistema de instalación “totalmente reversible, lo que favorece un mínimo impacto medioambiental”.
Con ello, insiste, “conseguiremos minimizar todo lo posible las consecuencias adversas en la zona del Paseo de Ostende por la Playa del Matadero, evitando los desperfectos y molestias a viandantes que el mar causa en los días de temporal”.
La edil socialista detalla que, “este es el segundo de los tres proyectos presentados por el Ayuntamiento al Grupo de Acción Costera Oriental de Cantabria”.
Esta instalación “es un sistema piloto y muy novedoso, que consiste en dar solución en los días de temporal en la mar, en los que el oleaje ocasiona problemas en el mobiliario del paseo e inundaciones en las edificaciones, aparcamientos y garajes colindantes”.
El proyecto tiene un coste de 13.648,80 euros y cuenta con la financiación del Grupo de Acción Costero Oriental, por mediación de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria y el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP).
En Castro “estamos muy acostumbrados a la fuerza del mar durante estos meses, por lo que hemos llevado a cabo este proyecto. Son muchas las zonas en las que el mar nos causa problemas, por lo que las ubicaciones de este sistema serán aumentadas, próximamente en la zona del Pabellón de Actividades Náuticas”.