Estos dos últimos años no han sido buenos para Carlos Goitia. A la pérdida de su hermano Alejandro, también artista, se sumaban algunos problemas de salud y la situación de la pandemia. Pero, como él mismo explicaba en Castro Punto Radio, “tengo una mujer, unos hijos y unos nietos que me ayudan a un montón”.
Goitia es autor, entre otras muchas obras, de tres grandes murales que visten la pista del polideportivo Peru Zaballa, el salón principal del Hotel Las Rocas y el altar de la Iglesia del Sagrado Corazón. Éste último es muy especial para él, porque “se hicieron unas cosas que parecían imposibles. Pero para mí ha sido fundamental y estoy orgullosísimo”.
Hemos recordado su excelente relación personal y profesional con el ceramista y escultor Paco Labiano, con quien se unió para crear el Monumento al Minero en Mioño. “Yo no había hecho nunca una escultura y después sentía que era alguien importante en el pueblo. Hasta entonces me parecía algo inalcanzable”, aseguraba.
Autor de cuadros dedicados a la vida marinera, retratos y otras obras como la talla de San Andrés y el trofeo del Coso Blanco, dedicó la etapa del confinamiento a retratar a su nietos. La última vez que expuso su trabajo fue en 2014 en el Castillo Faro y, de cara al futuro, no descarta volver a hacerlo. De hecho le gustaría poder organizar una exposición conjunta con otros pintores castreños como Llamosas, Arnedo o Agustín Fernández entre otros.
Si no has podido escucharlo, esta noche tienes ocasión de hacerlo en la redifusión de nuestro programa a partir de las diez en el 88.2 FM, https://castropuntoradio.es y en la aplicación móvil de Castro Punto Radio.