El pasado lunes 30 de septiembre la sociedad castreña quedaba consternada tras la aparición de una cabeza dentro de una caja en una vivienda de Castro Urdiales. Días después se confirmaba la identidad del fallecido, Jesús Mari Baranda, y se detenía a su pareja, Carmen Merino, como principal sospechosa.
La relación de la detenida con la Casa de Andalucía en Castro, de la que es socia, ha llevado a la presidenta de este colectivo, Ascen Lodeiro, a publicar una carta que dice textualmente lo siguiente:
“Hace una semana, el lunes día 30 de septiembre, saltó una noticia a los medios de comunicación que hizo temblar los cimientos de Castro Urdiales y de la Casa de Andalucía en este municipio.
Estamos todos consternados, horrorizados y con mucho dolor y estupefacción por lo sucedido. Una de las personas implicadas es socia de dicha asociación y, aunque hace casi dos años que no participa en el grupo de baile, seguía siendo socia.
Esta Casa, que es una asociación seria, sin ánimo de lucro, formada por más de 100 socios a los que les gusta cantar, bailar y difundir el folklore y la cultura andaluza en Castro y pueblos de alrededor cuando así lo han solicitado, colaborando también con asociaciones benéficas, no ha hecho ninguna declaración porque no tenemos nada que decir, salvo lamentar, como todo el pueblo, lo sucedido, y porque no nos gusta hacer especulaciones malintencionadas, como se han hecho por parte de muchas personas e incluso de algunos medios de comunicación que no hacen buen periodismo, sino que se aprovechan de estas noticias terribles para crear más morbo, estar en el candelero e incrementar ventas y oyentes, ajenos totalmente al dolor de todas las víctimas y personas involucradas.
Me parece indigno y terriblemente cruel que circulen bulos total y absolutamente falsos sin comprobar las fuentes y la veracidad de esos comentarios, como el bulo de las croquetas y el cocido que trajo la acusada a la Casa. ¿A qué clase de persona se le ocurre difundir y creer ese tipo de noticias macabras y truculentas más propias de una ficción terrorífica?; o lo del triángulo amoroso, totalmente falso. ¿Les parece que esa mujer que se encontró la cabeza, y que recuerdo que gracias a ella se ha podido descubrir el suceso, no tiene bastante con asumir y superar todo ese horror como para tener que escuchar estos comentarios terribles y dañinos, que no aportan nada de luz al caso que todavía está en secreto de sumario, pero sí hacen daño a personas que ya de por sí están sufriendo lo indecible?
Ya está bien de especulaciones macabras. Dejen en paz a Jesús, el pobre fallecido. Se merece respeto y consideración, al igual que su familia y la de la acusada, que tienen también mucho que superar, y la Casa de Andalucía que acoge a toda persona que gusta de participar en los eventos que se hacen para divulgar el folklore andaluz y que aman la alegría y en definitiva la vida.
Desde aquí quiero mandar nuestro cariño y apoyo a las familias involucradas y dar las gracias a todas las personas que nos han mandado su apoyo y su afecto. Condeno con toda la fuerza y sentimiento a la gente que se dedica a crear falsos testimonios y arrastrar al escarnio a personas que están sufriendo ya demasiado. Dejemos trabajar a los medios policiales, que son los que están investigando el suceso y, cuando se levante el secreto de sumario, dirán lo que de verdad ha sucedido. Hasta entonces, pido respeto, prudencia, silencio y apoyo a la gente que está sufriendo por esta triste y horrible situación”.
Imagen de archivo de una feria de primavera de la Casa de Andalucía.