El Centro Cultural La Residencia acoge los días 16, 23 y 30 de octubre, de 9 a 11 horas, un taller formativo gratuito titulado ‘Competencias Digitales para la Mujer’, organizado por la Dirección General de Igualdad y Mujer del Gobierno de Cantabria.
Como ha detallado en Castro Punto Radio la directora general, Consuelo Gutiérrez, “los objetivos de esta iniciativa son mejorar las competencias digitales de la mujer en distintos aspectos. Entre ellos, familiarizarse con la identificación y la firma digital, que les va a ser muy útil, por ejemplo, si son presidentas de asociaciones para relacionarse con las administraciones. Por otra parte, estamos convencidos de que la digitación va ser útil para tener relación con la banca y el comercio electrónico y fomentar las relaciones personales a través de las redes sociales”.
Una cuestión más importante que nunca en un momento en el que el coronavirus ha obligado a reducir las relaciones sociales y los contactos personales. “La pandemia ha acelerado un proceso de digitalización que va a ser fundamental. Es un proyecto que teníamos más a largo plazo y que hemos acelerado porque nos hemos dado cuenta de la importancia de tener acceso a las tecnologías porque van a ser nuestras aliadas en muchas cuestiones”.
Para participar en este taller, que tiene un límite de unas 15 plazas “para cumplir las medidas de seguridad sanitaria”, no es necesario tener un mínimo de conocimiento ni está orientado específicamente a ninguna edad, “aunque es cierto que los jóvenes están más familiarizados con estas tecnologías”. Las asistentes deberán acudir con la herramienta que tengan (móvil, tablet u ordenador), aunque nosotros tendremos tablets para la organización del curso”.
Las interesadas deben inscribirse en la web www.mujerdecantabria.es o llamando al teléfono 942 20 93 65 y, hasta completar el aforo máximo, accederán por orden estricto de inscripción.
Gutiérrez ha señalado que en materia de género “existen aún muchas brechas y una de ellas es la digital. Este taller trata también de ir disminuyendo esto”. Según la directora general, uno de los motivos que favorecen esa brecha, “no es que las mujeres tengan más dificultades para acceder a las nuestras tecnologías, sino que encuentran menos referentes y menos modelos donde tengan relación con ellas. Por ejemplo, si analizamos cuál es, en muchas ocasiones, el gran elemento socializador de la tecnología en los jóvenes son los juegos y siguen siendo fases muy masculinizadas. Los youtubers e influencers que hablan de tecnología suelen ser modelos muy masculinos y los niños se identifican más con ese ámbito que las niñas. Sigue pesando mucho el estereotipo y los diferentes roles de cómo usamos nuestro ocio y nuestras formas de jugar. Esto establece una base importante para que exista una diferencia entre los hombres y las mujeres en su acercamiento a las tecnologías”.