13 MAYO 2016 /
El próximo jueves, a las 9 de la mañana, comenzará en el Juzgado de lo Penal nº1 de Santander, el juicio por el caso del túnel de Mioño.
Se procesa a diez acusados de prevaricación, en unos casos, y tráfico de influencias en otros, por la contratación a dedo de obras para el acondicionamiento del Túnel de Mioño y para la eliminación de barreras en el Mercado Municipal de Castro Urdiales.
El Fiscal acusa de prevaricación a los miembros de la Junta de Gobierno Local, (presidida por el entonces alcalde Fernando Muguruza) por aprobar las ofertas presentadas por una empresa sin que hubiera concurso previo; y de tráfico de influencias al gerente de dicha empresa.
Por ello, solicita condenas de un año de prisión y multa de 14.000 euros para el gerente de la empresa que efectuó los trabajos, por un delito continuado de tráfico de influencias.
Diez años de inhabilitación para empleo o cargo público para los concejales de Obras y de Industria (éste es hermano del gerente de la empresa), por un delito continuado de prevaricación.
Ocho años y nueve meses de inhabilitación para cuatro de los concejales de la Junta de Gobierno Local, que aprobaron unas y otras obras, por un delito continuado de prevaricación.
Siete años de inhabilitación para otro de los miembros de la Junta de Gobierno Local, que sólo participó en la reunión que aprobó las obras del túnel de Mioño (no se le aprecia continuidad delictiva).
Siete años de inhabilitación para el secretario y el interventor del Ayuntamiento, por sendos delitos de prevaricación por omisión, al no advertir de la ilegalidad que se cometía en uno y otro caso.
Está previsto que el juicio continúe el 7 de junio a las 9 de la mañana en el Salón de Actos de Las Salesas, en Santander.
En la imagen, inauguración del túnel de Mioño.