17 NOVIEMBRE 2016 /
El alcalde de Castro, Ángel Díaz-Munío, ha valorado hoy la resolución del Tribunal Central de Recursos Contractuales, que ha declarado nulo el procedimiento de contratación del Castrobús, obligando a iniciar el proceso desde cero. Todo, después de las alegaciones presentadas por Autobuses Cuadra, una de las empresas que acudieron a la licitación.
Como ha recordado el alcalde, “no es la primera vez que sucede una cosa de este tipo” en lo que al transporte urbano respecta porque “en la pasada legislatura también recurrió un licitante, declarándose nulo el expediente de contratación”. Díaz-Munío espera que no vuelva a suceder, aunque reconoce que es posible, “en la medida que las empresas tienen capacidad de acudir a sus recursos jurídicos para encontrar fallos en el procedimiento, si no están conformes con la resolución que se haga”.
Con la esperanza de que esta circunstancia no se vuelva a repetir, “ahora toca analizar en detalle la resolución el tribunal y las causas por las que se ha pronunciado en esa línea. Después se procederá a abrir otro expediente y confeccionar nuevos pliegos de condiciones, tratando de introducir mejoras en lo que se ha detectado como defectos y volver a sacarlo a concurso”. Un proceso que, según el alcalde, “puede llevarnos cuatro o cinco meses”. Confía en que “seamos capaces de conseguir una resolución al concurso antes de que acabe el plazo máximo de prórrogas, en el mes de mayo”.
A falta de estudiar con detalle la resolución del Tribunal, Díaz-Munío ha adelantado algunas de las causas que han llevado a este organismo a declarar nulo el procedimiento. Y es que, “a la hora de valorar las ofertas presentadas, hay unos criterios objetivos y subjetivos y se nos reprocha haber mezclado ambos”. Es decir, “haber valorado temas que no deberían dar lugar a interpretación, de una forma interpretativa. No hemos discernido suficientemente ambos aspectos. Ha habido cosas que hemos entendido subjetivas, y así las hemos valorado, y no debían serlo”.
En cualquier caso, ha dejado claro que “no se nos reprocha, en ningún caso, que hayamos beneficiado a unos o perjudicado a otros”.
Por lo demás, el alcalde ha calificado todo esto como “mala noticia” porque “supone la pérdida de trabajo en esfuerzo, dedicación e ilusión en sacar adelante un contrato que es imprescindible para Castro”. Entiende que “estamos sujetos a unas leyes y unos tribunales, cuyas conclusiones aceptamos”, pero ha lamentado que “nos parece que el Ayuntamiento nunca va a tener la misma capacidad legal que pueden tener los grupos licitadores. Tendremos que mirar todo con mucho cuidado para evitar que haya una tercera vez pero, no va a ser fácil”.
Ha valorado el trabajo de los técnicos municipales “a los que no se puede reprochar nada” porque “creo que las cosas se han hecho bien”. A partir de ahí, “de cualquier situación hay que sacar conclusiones para mejorar y que no pase una tercera vez”.
