La empresa pública Tragsa ha comenzado esta mañana los trabajos previos para la demolición de Hotel Miramar, en la playa de Brazomar.
El derribo completo del edificio y pavimentación del paseo marítimo tiene un plazo de ejecución aproximado de dos meses, y un presupuesto de 332.000 euros.
Este lunes han entrado en el edifico operarios de Tragsa para organizar el vaciado desescombro previo a la demolición. Antes del derribo se retirará manualmente todo lo que se encuentra en estos momentos dentro del hotel, según han informado los responsables de la obra a Castro Punto Radio.
En el aparcamiento situado frente al edificio se instalarán los contenedores que recogerán lo que se vaya sacando del edificio, para lo que se acotará toda la zona. El paso peatonal quedará interrumpido desde ambos lados del hotel, y se podrá pasar de un lado a otro por la acera de enfrente (junto a los bares allí ubicados), cruzando los dos pasos de peatones.
La circulación de vehículos se desviará, y discurrirá, en carril único, por la calzada pegada a la acera de enfrente, donde ahora es zona de estacionamiento, ya que el resto de la plaza estará vallada (como se aprecia en las imágenes, los coches circularán entre la cinta que ahora se encuentra en el suelo y la acera).
Se interrumpe completamente el carril bici en toda la Avenida de la Playa, desde el cruce con el Paseo de Ocharan hasta la Casa de la Naturaleza.
Una vez desescombrado el interior del hotel, se desmontará el tejado, con especial cuidado, al estar construido con fibrocemento, que contiene amianto.
Posteriormente, una retroexcavadora cortará el edificio por partes transversales de arriba abajo, haciéndose la oportuna selección de residuos.
Los trabajos finalizarán con el pavimentado del paseo, dando continuidad a la balaustrada, paseo y jardineras. El aspecto estético del paseo será idéntico al que ya existe, delimitado de la playa por la línea de deslinde marítimo-terrestre.