Dos agentes de la Gendarmería Francesa se encuentran, un verano más, reforzando a la Guardia Civil durante las próximas tres semanas en la zona oriental de Cantabria, la comarca de la región que acoge más turistas de ese país.
Se trata de Amélie Josset, especialista en antidistubios perteneciente al Escuadrón Móvil de Perpignan y Mélanie Laurent, experta en menores víctimas de violencia. Forman parte del primer relevo de policias galos que trabajarán en Cantabria este verano.
Esta mañana visitaban el Ayuntamiento de Castro Urdiales, siendo recibidas por la alcaldesa, Susana Herrán.
Esta cooperación entre los cuerpos policiales español y francés en Cantabria no es nueva: arrancó en 2019, se suspendió por la pandemia del coronavirus en 2020 y se reanudó en 2021. Durante estas semanas, el dispositivo forma parte del Plan de Ocio de Verano organizado por la Delegación del Gobierno en Cantabria para reforzar la seguridad en varios municipios costeros de la región.