La Asociación de Hostelería de Cantabria ha vuelto a recurrir a los tribunales contra la decisión del Gobierno de Cantabria de limitar la apertura de los establecimientos de hostelería a las 1 de la mañana, no pudiendo aceptar nuevos clientes a partir de las 12.
El vicepresidente de la Asociación, el conocido hostelero castreño Tomás Sánchez Lombraña, ha hablado en Castro Punto Radio de “avería terrible la que se está ocasionando al sector desde el comienzo de la pandemia por un mal hacer de nuestros dirigentes. Tenemos una comunidad autónoma pequeña con 102 municipios y nos mantiene a seis sin abrir el interior de los locales en un momento en el que hay libertad de movilidad de un sitio a otro”.
Ha lamentado “esa insistencia en considerarnos el mal endémico del covid y no sabemos en base a qué. Hemos llegado a estar cerrados al completo y el índice de contagios ha seguido igual o en aumento”. Ha añadido que “nosotros seguimos estrictas medida de seguridad, desinfectamos las mesas tras cada uso, tenemos ventilación, aforos, distancias. Esto no ocurre en otros servicios como el transporte público o los bancos”. Además, “se ha demostrado, tras el levantamiento del estado de alarma, que con la limitación de apertura de la hostelería, proliferan los botellones y las fiestas privadas en lonjas y casas sin ningún control ni mascarilla. No tiene sentido”.
Los hosteleros se han visto “desamparados” por el Gobierno de Cantabria “que tampoco nos ha dado las ayudas suficientes para soportar este desastre, más en el ocio nocturno que no hace nada de caja y es uno de los más perjudicados”.
En este sentido, ha agradecido que desde el Ayuntamiento se otorgara a los pubs una licencia temporal de bar con el fin de poder colocar terrazas y atender en ellas. En cualquier caso, “las pérdidas son enormes”.