9 AGOSTO 2017 /
De la mano del director del Centro de Día, Alejandro Helguera, hemos conocido en Castro Punto Radio todos los detalles del funcionamiento de estas instalaciones, que gestiona la empresa Pro Maiorem.
Considera que se trata de “un recurso muy apetecible para las personas mayores y sus familiares” y ha explicado que “la intención de esta instalación es atender a las fases previas a un ingreso en una estancia residencial”. Teniendo en cuenta que “las personas mayores son muy reacias a entrar en una institución y a perder un poco sus rutinas diarias, nosotros intentamos mantenerlas y que sigan en contacto con su entorno más inmediato para, de algún modo, fomentar que estén en activo y relacionándose”.
El centro cuenta con “un horario muy amplio que se intenta adaptar lo máximo a las necesidades de cada caso y la idea es que estas personas siguen viviendo en su casa, pero ocupan unas horas del día para venir al centro por autocuidado y para prevenir y diagnosticar posibles situaciones que se vayan a ir dando en adelante con el proceso de envejecimiento y poder tratarlas de la manera más acertada para retrasarlas o prevenirlas”.
En cuanto a los requisitos de acceso de los interesados, Helguera ha señalado que se trata de un centro público y, por tanto, “se acoge a la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y a la Ley de Dependencia”. De esta forma, las plazas se limitan a personas empadronadas en Cantabria. A partir de ahí es el Servicio Cántabro de Salud el que realiza las valoraciones de dependencia, un trámite burocrático “bastante largo y que se puede extender hasta tres meses”.
Precisamente por eso, Helguera anima a los interesados a que, “aunque aún no tengan el perfil, iniciar los trámites de la valoración de tal manera que se les cree ya un expediente y toda la maquinaria se ponga en marcha para que, en el momento que puedan tener el perfil, les apetezca o tengan una necesidad puntual, sea más ágil hacer el ingreso en el centro”.
Los precios de uso de estas instalaciones varían en función de la situación económica de cada ciudadano, que se valora por las administraciones competentes. Así, puede haber personas que paguen el 100% e incluso otras que no paguen nada, como ha explicado Helguera. En el caso de Castro, “no hay ningún usuario que pague el 100% y la media está entre los 100 y los 300 euros al mes”, lo que incluye todos los servicios que precise el usuario, incluida la comida y el transporte en casos de dependencia grado tres, la máxima.
Pese a las importantes dimensiones del edificio que alberga el Centro de Día, con capacidad para 88 usuarios, lo cierto es que, a día de hoy, sólo están ocupadas unas 24 plazas, estando la instalación “infrautilizada”. Algo que el director achaca a “un cúmulo de circunstancias, desde el desconocimiento, hasta que muchas familias retrasan este tipo de usos por miedo a institucionalizar a la persona dependiente”.
Además, teniendo en cuenta que los trámites burocráticos llevan su tiempo, “una vez se plantean el hacer una solicitud para el Centro de Día, finalmente optan por una estancia residencial u otro tipo de recurso”.
Con todo, “ahora mismo estaremos usando un tercio del edificio. Cuenta con tres plantas y estamos haciendo la vida en una de ellas prácticamente”.
Desde la dirección del centro se está elaborando un programa que entregar a las administraciones, con el fin de “sacar mayor rendimiento al edificio y poder ofrecer más servicios y más recursos de mejor calidad al municipio. Es un uso socio-sanitario y se podrían hacer infinidad de cosas”. No obstante, “al final es una decisión política”.
Para terminar, Helguera se ha referido al funcionamiento en el día a día y en el trato con los usuarios. “Dentro de nuestro programa de calidad, le damos mucha importancia a la fase de preingreso e intentamos cubrir esa parte afectiva, normalizándolo y, de algún modo, haciéndolo muy accesible. Vamos pasando todas las valoraciones y haciendo el plan de cuidado personalizado para cada usuario”.
Después, “intentamos tener ocupado el tiempo constantemente en tres áreas troncales (atención sanitaria, atención personal y atención psicosocial). Desde primera hora de la mañana están haciendo actividades”.