22 AGOSTO 2016 /
Desde el suceso ocurrido de la pasada semana, cuando una chica de 15 años resultó herida y evacuada al Hospital de Laredo por saltar al agua desde el balcón del peñón de Santa Ana, siguen produciéndosereacciones desde los estamentos que tienen algún tipo de responsabilidad.
Si el viernes recogíamos las declaraciones del jefe de la Policía Local castreña, que indicaba que “no hay una norma en concreto que prohíba expresamente que la gente salte al agua desde el Puente Romano o desde la Ermita de Santa Ana”, la versión de Puertos es radicalmente distinta.
En declaraciones a Castro Punto Radio, responsables de la Dirección General de Puertos, organismo dependiente de la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Cantabria, lo ha dejado claro: “está taxativamente prohibido saltar al mar en el puerto de Castro, al igual que ocurre en todos los puertos de Cantabria. Si se sorprende a alguien infringiendo la norma, se aplicará la sanción correspondiente”.
Según indicaban a esta emisora, se sorprendían de la polémica surgida por este asunto, cuando las señales de prohibición son “evidentes: el salto está prohibido”. Ponían como ejemplo las señales de tráfico, “que todos debemos cumplir, haya agentes de la autoridad en las proximidades o no”.
El equipo de gobierno municipal, por su parte, declina opinar al respecto más allá de lo afirmado por la edil de CastroVerde, Virginia Losada, a la prensa regional el fin de semana: “la gente va ahí desde que existe el puerto, y no suele haber accidentes. Es una costumbre de siempre, se tiran todos los días y casi nunca pasa nada”.
Con lo que no sabemos si quien gobierna Castro Urdiales avala la tesis del jefe de la Policía Local, esto es, no sancionar, o la de Puertos, propietario de toda la zona portuaria, que es la contraria: multar.
Imagen de archivo de un salto desde Santa Ana.