Tras la decisión de Salud Pública de cerrar el instituto Ocho de Marzo y confinar en sus domicilios a los 650 alumnos y 78 trabajadores, hemos hablado en Castro Punto Radio con la directora del centro educativo, Cristina Sáez.
No ha podido precisar el número de positivos de coronavirus confirmados, pero sí ha dicho que “la mayor parte son asintomáticos o con síntomas leves”. En cuanto al estado de ánimo del personal ha señalado que “nos gustaría que no se hubiera producido esta situación, pero se escapa de nuestro ámbito de actuación. Es una situación muy difícil la que vivimos como sociedad, con un virus del que se desconocen aún muchas cosas”. Ha reconocido que el cierre “es una noticia negativa y nos disgusta”, pero ha defendido que “hemos adoptado todas las medidas establecidas en los protocolos y nos hemos volcado en ello desde el principio. Lamentablemente, la situación es ésta y no nos queda otra que cumplir estrictamente la cuarentena, que es importante porque, si no, todo esto no servirá de nada”.
Preguntada sobré qué ha ocurrido en el instituto para que Salud Pública haya tenido que tomar una decisión tan drástica, la directora ha señalado que “desconozco los detalles, pero entiendo que ha ocurrido lo mismo que en la comunidad autónoma y el municipio, con un aumento de casos. Al final nuestro centro, como los demás, es una representación de parte de esa sociedad. Salud Pública habrá analizado los casos y ha determinado que ésta es la mejor medida para frenar una posible trasmisión y contribuir a que la incidencia en el municipio baje y preservar la salud de todos”.
En los días previos al cierre del centro se hablaba de la existencia de más de una veintena de profesores en cuarentena. Al respecto Cristina Sáez ha detallado que “el pasado domingo contactó con nosotros Salud Pública para decirnos que se ponían en cuarentena dos aulas porque no sabían muy bien donde estaba el foco. Como medida de prevención se iban a hacer PCR a todos los docentes. Y es que, lo que pasa en Secundaria es que la organización de grupos es más compleja que en Primaria. A cada grupo le dan clase alrededor de 12 o 15 docentes, por lo que aumenta el volumen de profesores que se han tenido que someter a las pruebas como medida preventiva. Los que dieron negativo, se incorporaron a las aulas el mismo martes”.
Para Sáez, esa distribución de grupos “puede ser unos de los motivos por los que se ha decidido el cierre porque, si hay varios alumnos que están mezclados en función de las asignaturas, resulta complejo hacer cierres parciales cuando tenemos una incidencia elevada”.
No ha podido aportar el dato de positivos que hay en el instituto “porque eso lo actualiza el Gobierno de Cantabria”, pero ha dejado claro que “todas las personas que se sabe que han estado en contacto con algún positivo han sido notificadas. El resto quedan confinadas como medida preventiva para, si hay casos asintomáticos, no se continúe con la propagación del virus”.
Entiende la preocupación de las familias, pero ha mandado un mensaje de “calma en el sentido de que las personas que han estado con un caso positivo serán sometidas a PCR”.
Mientras dura la cuarentena, hasta el 27 de noviembre incluido, se impartirán clases telemáticas. “El centro ha estado trabajando desde el primer día para tener los mecanismos necesarios en caso de que esto ocurriera y podíamos contar con la plataforma a la que conectarnos, siguiendo así con el calendario escolar”.
Durante el cierre, se realizará una desinfección intensa de las instalaciones.
Imagen de archivo de Cristina Sáez, directora del IES Ocho de Marzo.