13 MARZO 2015 /
EL GOBIERNO DE CANTABRIA DENUNCIA PRESIONES DESDE EL GOBIERNO VASCO
La compañía Siban, ubicada en Gallarta (Abanto y Zierbena) y perteneciente al grupo Peosa, ha afirmado que su decisión de trasladarse a Cantabria “no es definitiva” sino “una posibilidad en estudio”, a la vez que ha confiado en “contar con la instituciones vascas” para encontrar un “espacio” que haga posible su mantenimiento en Vizcaya.
La empresa ha realizado esta “aclaración” después de que, el pasado 23 de enero, se hiciera público que el fabricante de bandas transportadoras había decidido instalarse en Cantabria, en terrenos de la futura ampliación del polígono industrial de Vallegón en Castro Urdiales tras cerrar su fábrica de Abanto.
Este anuncio se produjo en una rueda de prensa del presidente de Cantabria, Ignacio Diego, junto con representantes de la empresa, en la que se anunció que Siban se instalaría en Cantabria, en terrenos de la futura ampliación del polígono industrial de Vallegón en Castro Urdiales, con una fábrica que iba a suponer una inversión de 15 millones y la creación de 100 puestos de trabajo directos.
Además de estos nuevos puestos de trabajo se anunció el traslado de 50 empleados de su planta de Zierbena (Vizcaya), que, según reconocieron representantes de la empresa a preguntas de los periodistas, se iba a cerrar.
En ese encuentro informativo se explicó que el Grupo Peosa se había acogido al Plan de Comercialización de Suelo Público Industrial del Gobierno de Cantabria, que, además, iba a facilitar la financiación del proyecto empresarial mediante la concesión, a través de la Sociedad para el Desarrollo de Cantabria (SODERCAN), de un préstamo participativo de 3 millones de euros.
Además, se anunció que la empresa podría acceder a las ayudas del Plan Innpulsa del Ejecutivo regional, que, además, defenderá ante el Estado el acceso del Grupo al Programa de Incentivos Regionales.
Sin embargo, en un comunicado hecho público esta viernes, firmado por el director general de la planta de Siban Peosa en Gallarta, Pedro Echebarria, la compañía ha afirmado que, desde que el pasado 23 de enero los medios de comunicación se hicieran eco de la posibilidad de trasladar su actividad a Cantabria, “la presión mediática ha sido constante” y “lo publicado”, en algunas ocasiones, “no se ajusta a la realidad de lo sucedido”.
Por ello, ha puntualizado que, durante los últimos años, Siban ha buscado una nueva localización “viable” en Vizcaya, “que haga posible su expansión y creación de empleo” sin que, hasta la fecha, haya tomado “decisión alguna, aún menos definitiva, sobre el traslado de su actividad a Cantabria”.
“El supuesto traslado de la actividad a Cantabria única y exclusivamente se ha tratado de una posibilidad en estudio, entre otras más”, ha aclarado.
La empresa ha confiado en contar con la instituciones vascas “para que sea posible encontrar espacio suficiente para este proyecto” y, de esta forma, “mantener su actividad en Bizkaia”.
Siban-Peosa concluye el comunicado confiando en que “sirva para clarificar definitivamente su compromiso con la generación de actividad económica y empleo en Vizcaya, como así lo ha sido durante los últimos 50 años”.
En la rueda de prensa del 23 de enero, los representantes de la empresa, a preguntas de la prensa, explicaron, sin embargo, que, antes de dirigirse al Gobierno de Cantabria, mantuvieron negociaciones con otras instituciones del País Vasco pero “no les atendieron de la forma” en la que, en su opinión, debían para dar solución a la necesidad de espacio para incrementar su producción e incorporar nuevos productos.
“Cantabria nos ha ofrecido la oportunidad”, dijo el director financiero de la empresa, Gonzalo Pérez, quien explicó que las nuevas instalaciones en Cantabria permitirán a la empresa el lanzamiento de nuevos productos.
De hecho, los representantes de Siban reconocieron la “profesionalidad” del Gobierno de Cantabria, a través de SICAN y SODERCAN, con este proyecto, y agradecieron la “implicación” personal de Diego en ello y confiaron en que se trate del comienzo de un “bonito futuro”.
El mismo día del anuncio, el Gobierno vasco aseguró que Siban no se había puesto en contacto ni con el Departamento de Desarrollo Económico ni con la Spri, la agencia vasca de desarrollo empresarial.
Además, la Diputación foral de Vizcaya reconoció estar estudiando si la decisión de Siban de cerrar su planta de Zierbana y ubicarse en Castro Urdiales era un caso de deslocalización y, en ese caso, poder aplicar la normativa foral en esta materia, que incluye sanciones.
Unos días más tarde, el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, señaló que se iba a analizar la posibilidad de reclamar a Siban las ayudas concedidas por el Ejecutivo.
En las imágenes, los responsables de Siban-Peosa acompañan al presidente regional Ignacio Diego el pasado 23 de enero, cuando anunciaron la instalación de la fábrica en Castro Urdiales.
