Once playas cántabras lucirán de nuevo este año la ‘Bandera azul’, el mismo número de arenales que cuentan con esta distinción desde 2018, si bien se incorpora al listado la playa de Oriñón, en Castro Urdiales, y lo abandona la de Cuberris, en Bareyo. Además, repiten las playas de La Arena y El Sable, en Arnuero; Ris y Trengandín en Noja; Berria en Santoña; El Sable y Los Locos en Suances; El Sable de Merón en San Vicente de la Barquera; la playa de Comillas y la de Ostende, también en Castro Urdiales. En total, suponen el 13,75% del total de playas de Cantabria.
La ‘Bandera azul’ es un galardón a la calidad ambiental de playas y puertos que concede cada año la Fundación para la Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac). Para su obtención deben cumplirse una serie de criterios revisados periódicamente correspondientes a cuatro áreas principales: calidad de las aguas de baño, información y educación ambiental, gestión ambiental y seguridad, así como servicios e instalaciones en la playa.
En el conjunto de España han sido distinguidas 615 playas y 98 puertos deportivos con ‘Bandera azul’.