Tras el pleno de presupuestos de ayer, el principal grupo de la oposición, el Partido Regionalista, ha insistido en nota de prensa que “ha votado que ‘no’ al despilfarro y al endeudamiento que dará como resultado la miseria económica, financiera y social para los próximos años en nuestra ciudad. No queremos ser cómplices de la ruina de Castro Urdiales”.
“Justamente ahora que el futuro económico de muchas familias es incierto”, indica el PRC local, “no puede darse el lujo este equipo de gobierno de endeudarse por el ladrillo. Esto es electoralista y egoísta, puesto que están pensando en los intereses de su propio partido y no en los de los castreños”.
Recuerdan los regionalistas “que este año no haya regla de gasto no quiere decir que se tenga que despilfarrar el dinero, gastándonos los ahorros de todos, 6.000.000 de euros, y que para más inri pidan un crédito de 7.180.000 y malvendan parte de nuestro patrimonio por 5 millones, porque de todo este dinero lo que realmente se destina a ayudas sociales es mínimo, solo el 1,7% de la subida total del presupuesto”.
Reprocha el PRC que en el pleno “escuchamos durante 17 minutos al concejal de Hacienda hablar de lo que van a hacer, pero no ha dedicado ni uno solo a decir cómo lo vamos a pagar, incluso si vamos a poder hacer. Y eso es porque proyectar inversiones con el dinero municipal cuesta bastante menos que hacerlo con el propio. Por eso decimos que este equipo de gobierno es irresponsable, porque monta una fiesta pero pretende que la paguen los invitados”.
En cuanto al Partido Popular, para el PRC “hoy tenía la llave para inclinar la balanza hacia un lado o hacia el otro. Ana Urrestarazu se ha convertido en la concejal número siete del Partido Socialista. Siempre que este equipo de gobierno necesita de sus votos lo ha obtenido, una veces con su apoyo y otras veces les vale con la abstención”.
“Lo cierto”, concluyen los regionalistas, “es que estos presupuestos son una realidad, lo único que esperamos que Castro Urdiales no se convierta en lo mismo que ha sido la Junta Vecinal de Mioño con la gestión de Susana Herrán, que ha alcanzado ya una deuda de 1,5 millones de euros y varias visitas a los juzgados por su mala gestión”.