6 FEBRERO 2017 /
El orden del día de la sesión de esta tarde del Parlamento de Cantabria incluye la lectura, por parte de la presidenta, de una
Declaración institucional con motivo del Día Internacional en Conmemoración de las Víctimas del Holocausto.
En ese documento, se recuerda al centenar de cántabros que fueron deportados a los campos de concentración de Mauthausen y Gusen, etiquetados como grado III, el grado máximo de dureza para Campos de Concentración. Eran calificados como campos ‘Sin Retorno’, destinados, sobre todo, al exterminio. También eran conocidos como campos de los españoles, porque es donde fueron a parar la mayoría de nuestros compatriotas, deportados por orden de las autoridades francesas colaboracionistas con el régimen nazi.
La declaración que leerá esta tarde la presidenta del Parlamento destaca la importancia de que las instituciones, como parte de la reparación que se les debe a las víctimas, reconozcan “algo tan sencillo como su nacionalidad y su identidad territorial, ya que cuando fueron trasladados a estos campos de exterminio, lo fueron como apátridas”. En el día de hoy, “queremos recordar sus nombres, como españoles y como cántabros que nunca dejaron de ser”.
Finalmente, el escrito recuerda la liberación en ambos campos de concentración austriacos de todos los prisioneros por tropas estadounidenses en 1945. En un contexto mundial, “donde los conflictos se recrudecen y aumenta la población civil castigada y desplazada por los mismos, las tropas que liberaron los ‘Campos de los Españoles’, merecen también el recuerdo de nuestro parlamento”.
En la lista de 100 cántabros que fueron deportados a estos campos, figura el nombre de una castreña. Se trata de Anunciación Iriberri, nacida el 22 de diciembre de 1922. Fue ingresada y posteriormente liberada, en agosto de 1944, en el campo de Ravensbrück. Esta castreña fue una de las pocas liberadas que aparecen en el listado, ya que la mayoría de presos constan como fallecidos en los campos.