En torno a 30 ciudadanos se han concentrado este mediodía en los soportales del Ayuntamiento en repulsa por el asesinato del castreño Jesús Mari Baranda.
Un convocatoria efectuada a través de redes sociales por un vecino de Castro, Javier Arcocha Villa, en la que se ha leído un escrito al que ha seguido un minuto de silencio.
En la alocución se decía que “este acto tiene como fin demostrar nuestra repulsa ante un acto violento acaecido en Castro Urdiales y el fallecimiento de un vecino de nuestra ciudad. No podemos ni debemos usar este tipo de manifestación cívica como protesta contra unas leyes que no entendemos. Ni podemos acusar ni enjuiciar a nadie; no es nuestra labor”.
Se ha querido recalcar “la repulsa de la ciudad de Castro Urdiales y sus vecinos ante los hechos ocurridos. La no demostración de nuestra repulsa conlleva dar normalidad a este tipo de actos, algo que no es cierto, ya que deseamos que no vuelva a suceder”.
“No podemos dejar como lección a las próximas generaciones nuestra pasividad y falta de humanidad ante este tipo de sucesos. Por ello, debemos unirnos en un pacífico silencio”.
Ha concluido pidiendo “que nuestro silencio sirva para acompañar y reconfortar a todos los que sufren por esta tragedia”.