El presidente regional, Miguel Ángel Revilla, no ve “un inconveniente” el brote de coronavirus detectado en los hospitales de Cruces, Basurto (Vizcaya) y Txagorritxu (Vitoria) para reabrir la ‘frontera’ entre Cantabria y País Vasco el próximo lunes, 15 de junio, es decir, una semana antes de levantarse el estado de alarma en toda España, el día 21, cuando se podrá circular libremente por todo el país. Y es que a su juicio se trata de un foco que está “absolutamente controlado y las personas que han estado en contacto con los nuevos positivos por Covid-19 han sido aisladas, por lo que no hay ningún riesgo” de contagio, ha aseverado.
“Nos puede pasar a cualquiera”, ha añadido el jefe del Gobierno autonómico, que aún no ha tomado ninguna decisión sobre la movilidad con Euskadi, asunto que se abordará este jueves en la reunión semanal del bipartito PRC-PSOE y en base a informes solicitados a la Consejería de Sanidad.
En respuesta a preguntas de los periodistas en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, que conmemora su 30 aniversario, el regionalista ha dicho que le consta que el lehendakari, Iñigo Urkullu, también está pidiendo informes, pues “el deseo de los dos y de las dos comunidades es abrir, eso sí, meditadamente, de forma conjunta y con garantías”.
“El deseo existe, pero yo voy a tomar todas las medidas necesarias para que la decisión sea razonada desde el punto de vista económico y desde el punto vista sanitario”, ha precisado Revilla, que siempre se ha mostrado partidario de “convivir con un cierto riesgo” y relanzar la actividad económica.
En todo caso, ha diferenciado el brote surgido en Basurto -con 25 infectados y un fallecido- o los registrados en el hospital vizcaíno de Cruces y el de Txagorritxu, en Vitoria, pues son “recintos cerrados de uno que apareciera de repente en una ciudad, en la calle, donde no está localizado”.
Teniendo en cuenta esto y el temor que existe, Revilla se ha preguntado si el hecho de que País Vasco y Cantabria permitan la movilidad entre ambas comunidades “una semana antes supone más riesgo que una después. Si el día 21 se va a abrir toda España no veo que sea un riesgo mayor abrir dos comunidades una semana antes”, ha comentado.
Revilla cree en cambio que esa reapertura de fronteras podría ser “interesante para la imagen de Cantabria y Euskadi, que podrían presentarse como dos regiones seguras y que han hecho bien los deberes, además de constituir una experiencia piloto interesante entre dos territorios muy próximos”.
“A fin de cuentas, moverse de Cádiz a Sevilla se puede hacer ya y hay mucha más distancia que entre Bilbao y Santander”, ha reflexionado al respecto.
“La gente está deseando comunicarse y la gente de Euskadi está deseando volver, muchos de ellos, a sus casas, porque tienen aquí sus viviendas”, ha concluido Revilla.
Imagen del presidente Revilla acompañado por el lehendakari Iñigo Urkullu.