20 MARZO 2017 / La incertidumbre en torno a la celebración del Coso Blanco 2017 es total. Es la sensación que tienen los carrocistas, que consideran que esta Fiesta de Interés Turístico Nacional «no está cuidada por el Ayuntamiento». Así lo ha dicho en Castro Punto Radio Juan Liendo, miembro del Grupo Vasolari, que entiende que «si no se tira para delante y no se habla de muchas cosas que hay que mejorar, el desfile va en picado». Tiene claro que los grupos que elaboran carrozas «están muy cansados y, ahora mismo, no sé el número de ellas que van a salir». Y es que, sin locales no pueden empezar a funcionar. Es, a día de hoy, el problema más urgente a solucionar para que se pueda celebrar la próxima edición del Coso Blanco. Los carrocistas «no hablamos de naves, sino de un localillo para empezar con el papel y, después, los dos últimos meses, que el Ayuntamiento pueda alquilar un par de sitios donde, todos juntos, podamos realizar el montaje final». Según Liendo, «no estamos pidiendo cosas estratosféricas, sino que estamos hablando de cuidar la fiesta». Ha recordado cómo el concejal de Festejos, José Sámano, «presentó el cartel del Coso en Fitur y no sabe las carrozas que va a tener porque las inscripción se abren en abril». Se pregunta «qué pasaría si, al final, no hay ninguna». Insiste en que el Ayuntamiento «tiene que tomar decisiones porque, éste, no es un concurso normal sino una Fiesta de Interés Turístico Nacional». Liendo anima al Consistorio a que tome una postura. «Si quieren tratarlo como un concurso normal, pues que abran una inscripción y que se apunte el que quiera y se busque la vida, pegando papel en casa pero, que cuenten con que tendría tres carrozas». Ahora bien, «si quieren cuidar la fiesta un poco, hay que favorecer que haya más grupos que hagan carrozas porque, de lo contrario, esto va a dejar de existir. Por mucho que pongamos focos, sonido y tribunas, lo importante son las carrozas y tenemos que decidir si queremos que las haya o no, porque esto se cae por todos los lados». Los carrocistas «nos hemos llegado a plantear si hacen falta las carrozas para celebrar el Coso Blanco y si se podría hacer uno sin ellas. A ver si alguien se mueve. Igual los grupos políticos dirían qué bien que nos hemos ahorrado un dinero». Y es que, «aquí sólo miramos el gasto y nadie habla de lo que genera la fiesta». Como están ahora las cosas, «es imposible que se presenten grupos nuevos. Un último premio son 800 euros, de los que tienes que descontar las retenciones. Un metro cúbico de tabla vale 200 euros y, con eso no llenas medio carro». En esta línea, Liendo ha reconocido que hay comentarios de cierta gente que molestan. «Hay muchos que creen que el carrocista quiere ganar dinero y nosotros, por ejemplo, salimos a la par. Es un concurso y el que quiera que se apunte y verá cómo son las cosas». El concejal les convocará a una reunión, en los próximos días, en la que les comunicará cómo va la búsqueda de locales y si hay posibilidad de que el Ayuntamiento pague el alquiler de un local grande dos meses antes del desfile para montar. Es la necesidad más urgente pero, a partir de ahí, «hay que cambiar muchas cosas porque está mal organizado». Los carrocistas entienden que hay que elaborar un reglamento que rija el Coso y que la fiesta “siga su rumbo, independientemente del color político que gobierne en cada momento”. Al margen de este tema, Liendo ha hablado de los últimos acontecimientos en cuanto a la resolución de premios de la edición de 2016 y la desestimación, por parte del interventor, del recurso presentado por Javier Carrasco, que tiene intención de llevar el asunto a los tribunales. Considera este carrocista que «esto no debería haber llegado a donde ha llegado, a manos del interventor, sino que, nos tendríamos que haber sentado a solucionarlo días después del Coso». Defiende que «Carrasco no tiene por qué gastar dinero en acudir a la justicia cuando todos los carrocistas tenemos razón». Se trata de un problema «que debería haber resuelto el Ayuntamiento, como responsable de lo que pasó». Antes de su dimisión, la concejala, Ainhoa Pérez, «nos ofreció una solución (entregar dos primeros premios y que nadie perdiese dinero) que nos pareció bien pero, estábamos hablando de dinero público y no sabemos si eso se puede hacer». Lo que tienen claro que «está mal» es «lo que se ha hecho ahora. A mí me van a ingresar un dinero por subir un puesto en la clasificación pero, si la justicia da la razón a Carrasco, yo le tengo que devolver el dinero». Se queja de que «no hay acta ni hay nada y ésta es una historia que se tendría que haber solucionado antes. Estamos cansados de que siempre se hable de los carrocistas».